Sesenta años después de la última observación de la planta que se había hecho a Catalunya, se ha reencontrado en el Parque Naturales de los Puertos la orquídea 'Orchis Cazorlensis'.

Han hecho falta cinco años de prospecciones en el macizo para volver a ver un ejemplar de esta especie endémica de la mitad oriental de la península Ibérica y Mallorca. El hallazgo lo han hecho este mes de mayo los ambientólogos Marc Aixarch y Bruno Duran.

Está incluida en el catálogo de flora amenaza en peligro de extinción. Los únicos registros ciertos que habían detectado la planta en el territorio, en concreto en los Ports, fechan de 1915, por el botánico Pius Font i Quer, y de 1953, por el botánico Santiago Llensa de Gelcen. De momento, se ha encontrado un único individuo reproductivo, ya ha acabado la floración.

Orquídea peligro extensión ACN

Orchis Cazorlensis / ACN

Font y Quer herborizó la orquídea 'Orchis Cazorlensis' en la vertiente occidental del monte Caro, el 15 de junio de 1915, mientras que Llensa de Gelcen recolectó dos individuos floridos en la fuente de l'Espada, el 25 de mayo de 1953. Desde las citas de estos dos botánicos catalanes nadie más había podido localizarla en Catalunya. El pasado 6 de mayo, los ambientólogos Marc Aixarch y Bruno Durán, en el marco de unos trabajos de prospección de flora amenazada en los Ports, localizaron la especie en el sector suroeste, en el término municipal de la Sénia.

Se ha localizado en un hábitat de pinar mixto clareado de pino rojal (Pinus sylvestris), con predominio prácticamente absoluto de pinaza (Pinus nigra subsp. salzmannii), y por encima de los 1.080 metros de altitud.

El único ejemplar que se ha observado es reproductivo y ya ha acabado la floración. A efectos biológicos, este ejemplar podría ser un nuevo núcleo de la población aragonesa de Orchis Cazorlensis próxima a los límites del Parc, de la cual habían ido detectando nuevos rodales desde el 2009.

En base a la observación de este único ejemplar, se puede confirmar la presencia de esta orquídea en Catalunya. Las prospecciones se han hecho durante cinco años, en unos trabajos en el Parc Natural dels Ports para mejorar el conocimiento sobre la flora amenazada presente dentro del ámbito de este espacio natural.