El frente de precipitaciones del fin de semana pasado ha dado un ligero respiro a la grave sequía que está sufriendo Catalunya. Ahora bien, ha sido un respiro insuficiente, ya que las reservas de las cuencas internas prácticamente no han crecido, a pesar de la lluvia y la nieve. De hecho, los embalses no han ganado ni medio punto porcentual de agua. Concretamente, los datos de la Agencia Catalana del Agua (ACA) para este domingo han elevado las reservas hasta el 14,79%, un tímido incremento respecto del viernes, cuando estaban al 14,41%. La sequía que Catalunya arrastra desde 2020 es tan intensa, que el impacto de las últimas precipitaciones ha sido bajo en los pantanos.

Las precipitaciones caídas el fin de semana pasado han dejado cerca de cien litros por metro cuadrado en el macizo del Montseny y hasta medio metro de nieve nueva en zonas del Pirineo y Prepirineo, donde muchas de las estaciones de esquí han asegurado su apertura por Semana Santa. La mayoría de embalses han crecido, y, por ejemplo, el de Sau llega ahora al 2,15%, casi el doble que dos días antes, si bien con un porcentaje todavía ínfimo. Otros pantanos también han ido al alza, como el de Foix, en Castellet i la Gornal, que ha llegado al 60% de su capacidad por primera vez desde el junio pasado, dando un salto de cuatro puntos durante la última semana.

En todo caso, el 0,38% de incremento gracias a los chaparrones del sábado y domingo es la subida diaria más alta en nueve meses, desde junio de 2023. El caudal de los ríos gestionados por el ACA también subió el sábado hasta un nivel que tampoco se veía desde el pasado junio. Antes del episodio de lluvias, era de 36 m³ por segundo, uno de los niveles más bajos de la actual sequía, pero subieron hasta 187 m³ por segundo el sábado, una cifra que no se había registrado desde junio de 2023.

Teniendo en cuenta solo el sistema Ter-Llobregat —que abarca Barcelona, su área metropolitana, y parte de Girona—, los embalses han pasado en el mismo periodo del 14,7% al 15,3%, un incremento un pelo superior a la media de todo Catalunya. En cambio, en la cuenca del Ebro, el crecimiento ha sido más notable. Después de las lluvias de los últimos días, no solo en Catalunya, sino en Aragón y Navarra, los embalses de toda la cuenca del río se encuentran ya al 70% de su capacidad. Si se tienen en cuenta solo los embalses de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) —que alimentan la mitad oeste de Catalunya— estos no están tan llenos, pero mucho mejor que las cuencas internas, al 44,49%. Esta cifra es más alta que en semanas anteriores y supera la registrada hace un año, cuando estaban al 38%.

10 episodios más

Un episodio de precipitaciones que se ha demostrado insuficiente para superar la actual situación de falta de agua. Y es que, para acabar con la sequía, Catalunya necesita aproximadamente 10 episodios más como el que se ha vivido este fin de semana. La sequía de 2008 acabó, precisamente, de esta manera: con una primavera muy lluviosa que cambió la situación en solo dos meses, disparando las reservas de agua.