El juzgado de instrucción 1 de Granollers ha recibido hoy a los dos detenidos en relación a la fiesta rave de Llinars del Vallès, precisamente los que Mossos había detenido como los principales organizadores. La magistrada ha acordado para ambos la libertad provisional con comparecencias periódicas en el juzgado. Así lo confirma el TSJC. Los detenidos han contestado sólo a preguntas de sus abogados.

La holandesa y el tarraconense en libertad

Ahora mismo, la causa está abierta por los delitos de resistencia y desobediencia. Se trata de una mujer de 29 años holandesa y con vecindad en Amsterdam, y un hombre de 22 años, de nacionalidad española y con domicilio en Tarragona. Según han informado fuentes de los Mossos d'Esquadra, no se tiene constancia de antecedentes de ninguno de los dos acusados, que fueron detenidos en el mismo lugar donde se celebraba la fiesta y trasladados a la comisaría del cuerpo en Granollers.

Y con respecto a los otros cuatro identificados, estos serán citados a declarar en el momento que se considere oportuno a medida que avance la instrucción. Sin embargo, en el operativo se identificó a 215 personas, que serán denunciadas por vulnerar la normativa vinculada a las restricciones sanitarias con multas de 3.000 euros, mientras que los organizadores tendrán que afrontar sanciones de hasta 600.000 euros.

Fin de Año de fiesta eterna

Más de 150 personas se reunieron para celebrar la Nochevieja en una nave abandonada de Llinars del Vallès para hacer una macrofiesta ilegal que se alargó más de 40 horas con el punto final de la intervención de los Mossos. Tal como se puede ver en las imágenes, los asistentes bailaban en un espacio cerrado, sin respetar la distancia de seguridad y sin mascarilla, el caldo de cultivo ideal para propagar la Covid-19.

Muchos de los vehículos aparcados en la nave eran de matrícula extranjera y, algunos asistentes, amenazaron con continuar la fiesta durante, al menos, tres días. Lo consiguieron a medias, aunque después pedían diálogo para no ser desalojados. Tampoco se actuó con una grúa para retirar los coches mal aparcados destrozando los campos próximos.

La Federació Catalana de Locals d'Oci Nocturn (FECALON) se ha preguntado este sábado cómo centenares de personas, algunas llegadas desde países europeos, han podido llegar hasta Llinars de Vallès para participar en una fiesta 'rave' cuando hay decretadas restricciones a la movilidad por la pandemia del coronavirus.