La fuga de una veintena de pasajeros a través de las pistas del aeropuerto, debido a una supuesta emergencia médica, ha sacudido a la Fiscalía General del Estado.

Sobre el suceso, la Fiscalía General ya ha contactado con los fiscales de las Islas Baleares para decidir cuál será el posicionamiento cuando, próximamente, se juzgue a los responsables del incidente. En este sentido, según ha publicado el diario El Mundo, la Fiscalía estudia acusar a los protagonistas del incidente por sedición. Un incidente que supuso la huida de 24 personas a través de las pistas del aeropuerto de Son Sant Joan el viernes pasdo por la noche. La escapada obligó a cerrar el aeropuerto durante tres horas.

Fiscalia estudia el delito de sedición

Dado que los hechos del pasado 5 de noviembre son insólitos, el Ministerio Público pretende contemplar todas las variantes legales que ampara el Código Penal. Asimismo, se está barajando la posibilidad de acusar a los protagonistas del intento de entrada irregular en España por vía aérea de un delito de desórdenes públicos, pero también sumar delitos más graves como el de sedición que contempla penas de hasta ocho años de prisión.

Todavía buscan 12 de los 24 huidos

A día de hoy, todavía no han sido encontradas 12 personas. Entre los 12 tripulantes detenidos, hay uno que fue arrestado para agredir a un guardia civil que acudió al avión. Y otro que es el supuesto enfermo. Después de varios análisis en el hospital, se ha determinado que el viajero enfermo en realidad no lo estaba, y por eso ha quedado detenido por presunto delito de favorecimiento a la inmigración ilegal.

Desde el Gobierno, argumentan que el protocolo de la Guardia Civil contempla la vigilancia de la ambulancia que fue a la aeronave a atender la urgencia médica, pero que no obliga establecer un dispositivo de vigilancia del avión, cosa que hizo posible la huida de las 24 personas. También explican que pasaron unos 75 minutos entre que el supuesto enfermo fue evacuado y el motín. Así, se abre la puerta a la posibilidad de que se tratara de una huida improvisada del grupo al ver que la aeronave se encontraba en tierras europeas.

Los fugados se dirigían a Turquía, donde no piden visado y, por lo tanto, no se puede descartar que, realmente, su destino final fuera Europa. Sin embargo, el pasado sábado 6 de noviembre la delegada Gobierno en las Islas Baleares, Aina Calvo, declaró que "todos los escenarios están abiertos" y que "no hay datos" para confirmar que sea una operación orquestada por un grupo de personas.