Los juzgados han declarado oficialmente como muertas a las tres personas desaparecidas —dos hombres y una mujer— a la catastrófica DANA del pasado 29 de octubre en el País Valencià después de que el Centro de integración de datos (CID), constituido por la DANA, ha acordado su disolución, cuando se han cumplido siete meses de la riada, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV). La cifra total de víctimas mortales contabilizadas por este órgano técnico, que es independiente de la que determinan las autoridades judiciales en los procedimientos que están en curso, se elevan a 227, de las cuales 136 son hombres y 91 son mujeres. A esta cifra hay que añadir la defunción de una mujer de 79 años en un centro hospitalario, que murió a causa de la falta de tratamiento en los días posteriores a la DANA.

Las víctimas de la DANA

A las 224 víctimas mortales se las practicó la autopsia entre finales de octubre y principios de enero. Del total de las víctimas mortales, 221 ya habían sido identificadas plenamente antes de que se cumpliera un mes de las fatídicas inundaciones. Del total de autopsias, 171 se pudieron hacer mediante huellas dactilares, 48 por el ADN y otros 5 casos se corresponden con identificaciones en vida en centros hospitalarios. Otras tres personas todavía están desaparecidas, aunque los juzgados de València, Picassent y Requena han declarado su defunción legal en las últimas semanas. Este viernes, un juzgado ha declarado oficialmente la defunción de la última persona que seguía desaparecida, Elisabeth Gil, de 37 años, y madre de dos niños, que desapareció en la localidad valenciana de Xest el 29 de octubre después de que la barrancada arrastrara el vehículo que conducía su madre, cuyo cuerpo ya apareció. El coche fue localizado, vacío, el 13 de febrero en el barranco del Poyo.

Disolución del CID

El Centro de integración de datos es un órgano técnico integrado por una oficina forense y una oficina de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y su principal función consiste en reunir y supervisar los diferentes informes de identificación que se elaboran por las diferentes instituciones a las personas muertas en sucesos con múltiples víctimas. Su principal función durante la DANA consistió en la identificación de las personas muertas; ahora, después de dar por finalizada su tarea, los responsables del Instituto de Medicina Legal de València y de la Policía Nacional y la Guardia Civil han decidido disolver este órgano constituido hace siete meses para hacer frente la gestión de las víctimas de la DANA.

A pesar de esta disolución, las instituciones que integran el CID siguen ejerciendo sus respectivas competencias al servicio de las autoridades judiciales en el marco de esta catástrofe y siguen pendientes de la evolución de las labores de búsqueda de los tres desaparecidos.