Insostenible. Así es la situación en el barrio del Raval donde, a pesar del plan de choque anunciado por el Ayuntamiento de Barcelona y el aumento de la plantilla de la Guardia Urbana, que ayer incorporó 56 nuevos agentes en Ciutat Vella, continúa inmerso en un proceso de degradación. En menos de una semana, los vecinos han recopilado un conjunto de imágenes que muestran que la droga, los narcopisos, la suciedad, la inseguridad y la indigencia sigue imperando en la zona.
Al lado de las jeringuillas, las imágenes de varios yonquis que duermen en la calle, estirados en el suelo, en sofás o en los portales de algunos domicilios:
Las fotografías se han cogido en las calles Picalquers, dels Àngels, Egipciaques, plaza de Sant Josep Oriol y la Reial Acadèmia de Medicina, entre la 1 de la madrugada y las 8 de la mañana. Aparte de la proliferación de drogas y narcopisos también denuncian la dejadez del barrio y la suciedad que se extiende por muchas calles:
