Una delegación catalana ha participado este domingo a los actos de conmemoración con motivo del 79.º aniversario de la liberación del campo de concentración nazi de Mauthausen, en Austria, el año 1945. Entre los millares de víctimas de los campos del horror nazi se cuentan unos 1.400 catalanes, muchos de ellos prisioneros y exiliados de la Guerra Civil, y que acabaron encarcelados y asesinados en los campos de concentración de Mauthausen y de su entorno, como el de Gusen. El primer acto de la jornada ha sido de buena mañana delante de la placa conmemorativa que desde el 2017 la Generalitat tiene en el campo de concentración.
La delegada del Govern en Europa Central, Krystyna Schreiber, ha encabezado la delegación acompañada del director del Memorial Democrático, Jordi Font, y de los presidentes del Amical de Mauthausen y de Triangle Blau, Juan Manuel Calvo y Pau Argemí, así como de miembros de las asociaciones y ciudadanos anónimos desplazados desde Catalunya y otros países europeos.
El Govern alerta del auge del fascismo y los discursos de odio
Schreiber ha destacado la necesidad de seguir conmemorando y seguir recordando a las víctimas, año tras año. "La memoria es el futuro. La Europa de hoy está también construida sobre la experiencia de hecatombes como la que se vivió en Mauthausen. Es nuestro deber dar sentido al sacrificio que han hecho los valientes hombres y mujeres que murieron aquí. Es nuestro deber aprender cómo nuestra sociedad llegó a romper con los principios fundamentales de nuestra civilización, para construir un futuro mejor. No al discurso de odio, no al racismo, no al ataque contra otros porque piensan diferente. El coraje civil es clave. Hoy más que nunca. Por vosotros, por nosotros, por nuestros hijos e hijas, seguimos construyendo puentes, seguimos defendiendo la esperanza. Quizás es este el máximo honor que podemos dedicar a los hombres y mujeres a quienes hoy rendimos homenaje", ha aseverado.
La delegada del Govern también ha recordado que año tras año la situación está empeorando en Europa, con guerras a 900 kilómetros de Mauthausen, como en Ucrania, en Gaza y muchos otros lugares del mundo, así como "el auge del fascismo dentro de la misma democracia, a la vez bien disimulado pero muy resistente". Seguidamente, Font ha añadido que cuando se recuerdan los deportados republicanos se vuelven a hacer valer sus compromisos cívicos y políticos. "Su historia y el testimonio que hemos heredado son fundamentales en la preservación de la calidad democrática en el presente", ha asegurado.
Ángel Víctor Torres y Pablo Bustinduy, también en Mauthausen
También ha participado una delegación del Estado formada por el ministro de Territorio y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, el ministro de Derechos Sociales, Pablo Bustinduy, el secretario de Estado de Memoria Democrática, Fernando Martínez López, y la embajadora en Austria, Maria Aurora Mejía. El séquito catalán ha completado la jornada conmemorativa participando en la ceremonia internacional, en la que Catalunya ha depositado flores con las otras delegaciones venidas de todo el mundo para recordar a las víctimas del nazismo.