Las grabaciones telefónicas efectuadas por los Mossos d'Esquadra semanas después de los atentados del 17-A desvelan que algunos familiares y el entorno próximo de uno de los terroristas ven a los jóvenes muertos como "mártires que murieron por Alá". Concretamente, la hermana de uno de los terroristas muerto en Cambrils, Moussa Oukabir, y de uno de los encarcelados, Driss Oukabir.

Según consta al sumario —al que ha tenido acceso la ACN— Hafida Oukabir afirma que Dios se ha llevado a su hermano porque "está en el camino recto". "No han hecho daño, no han tocado, no han insultado, no han maltratado", dice en una conversación con su madre.

Además, ambas reproducen lo que les dijo el imán responsable de amortajar los cuerpos: "No hay que lavar a los chicos porque son mártires, se marcharon con Dios; rezó sobre ellos el Profeta". Según consta en el sumario, este imán les pidió que no explicaran este mensaje porque los imanes "estaban vigilados".