La cadena de comida rápida Burger King ha sido sancionada por la Agencia Catalana de Consumo por "presunta vulneración de los derechos lingüísticos de las personas consumidoras o incumplir las obligaciones en materia lingüística que establece la normativa". Un cliente de la hamburguesería denunció hace 2 años que la pantalla digital para pedir comida en un local de la ronda de Sant Pau solo incluía el castellano y el inglés en su carta. La opción en catalán no aparecía. El denunciante, Xavier Dengra, ha recibido la respuesta de la Agencia Catalana de Consumo donde le comunicaba que se ha abierto un expediente sancionador a la empresa de comida rápida para tratar de "preservar un interés general". El dictamen incide que en caso de confirmarse la infracción, se podría llegar a sancionar con una multa de hasta 10.000 euros, que sería considerada como una infracción leve, según la ley del código de consumo. Dengra que ha hecho pública la resolución, ha asegurado que "solo hacemos camino si luchamos por nuestros derechos lingüísticos con todas las herramientas -más allá del tuit de queja legítimo pero efímero".

Los hechos denunciados pasaron el 25 de septiembre de 2020, cuando Xavier Dengra se disponía a efectuar su pedido en las pantallas del Burger King y se dio cuenta de que no estaba disponible la opción en catalán. "El panel electrónico no mostraba el catalán como opción, por lo cual, como clientes, no hemos podido solicitar nuestro pedido en nuestra lengua, lo cual contradice el código y la ley de consumo de la Generalitat de Catalunya," escribía Dengra. En esta hoja de reclamación, Dengra solicitaba que "todo el servicio que ofrezca la compañía esté también en la lengua propia de Catalunya y no discrimine lingüísticamente a los ciudadanos. En aquel momento, Dengra aseguró en Twitter que "la defensa de la lengua también implica perder 1 hora tramitando las tres copias de una hoja de reclamación en Burger King".