El papa León XIV se ha dado un baño de masas este sábado por la tarde en el marco del Jubileo de los Jóvenes, que se celebra en Roma durante este fin de semana. Delante de centenares de miles de jóvenes llegados de todos los rincones del planeta, el papa ha declarado que "el mundo necesita misioneros de justicia y paz", así como "esperanza" para el futuro. "¡Cuánto necesita el mundo misioneros del Evangelio que sean testigos de la justicia y la paz! ¡Cuánto necesita el futuro hombres y mujeres que sean testigos de la esperanza! ¡Queridos jóvenes, esta es la misión que el Señor Resucitado confía a cada uno de nosotros!", ha exclamado el santo padre al responder una pregunta dirigida a él por parte de los asistentes al acontecimiento, que marca la víspera de la misa multitudinaria programada para el domingo.

León XIV se ha desplazado esta tarde hasta la explanada de Tor Vergata, a la periferia de Roma, para presidir una víspera con centenares de miles de personas llegadas de todo el mundo y que participan en este acto jubilar dedicado a los jóvenes. Durante el encuentro de este sábado por la tarde, que precede a la misa del domingo que clausurará el acontecimiento, el papa ha respondido a tres preguntas planteadas por los jóvenes. En la tercera, un joven ha preguntado al santo padre sobre como una generación a menudo tildada de superficial puede encontrar el bien en medio de la incertidumbre, en la cual León ha respondido que depende de la conciencia, de "nuestra comprensión de lo que es bueno". Aunque el número total de participantes todavía está por determinar, el Vaticano vaticina que podría haber participado hasta un millón de personas en el acto más esperado y más multitudinario del Año Santo.

La presencia de un gran número de personas ha quedado perfectamente constatada por la multitud de vídeos en que muestran la llegada de León XIV en el recinto, en el cual miles de personas y jóvenes de todo el mundo pasarán la noche antes de la misa del domingo, presidida por el mismo papa. León XIV ha llegado en helicóptero hasta una zona próxima a la explanada, a la cual ha llegado a bordo del papamóvil, desde donde ha saludado a los millares de fieles congregados. Más tarde, León XIV ha encabezado una procesión hasta el escenario principal, desde donde ha presidido el acto y ha respondido las preguntas de los jóvenes.

El pontífice ha aprovechado la ocasión para lamentar la muerte de una joven española y otra de egipcia, que han muerto "estos días" antes del inicio del Jubileo. "Digo eso, esta tarde, pensando en dos chicas. María, 20 años, española, y Pascale, 18 años, egipcia. Ambas han decidido venir a Roma para el Jubileo de los Jóvenes y la muerte los ha acogido en estos días", ha dicho el pontífice desde el escenario, ante una multitud de jóvenes llegados de todo el mundo. La española mencionada por el papa es María Cobo, de 20 años, que murió el pasado 30 de julio antes de llegar a Roma, según confirmó la Archidiócesis de Madrid. La egipcia Pascale Rafic murió anoche de un fallo cardiaco cuando viajaba en bus en la parroquia de Artena, a la provincia de Roma, donde se alojaba durante la celebración del Jubileo. El papa ha cerrado el acontecimiento de hoy animando a los jóvenes a "perseverar en la fe con alegría y valentía".