En los últimos años se ha venido realizando un sinfín de estudios del papel de las bacterias en la salud intestinal, pero se ha hablado menos de los hongos, otro microorganismo que vive en nuestro intestino y que son también muy importantes para la salud y la enfermedad. Un equipo de expertos de la Universidad de Utah Health han analizado su función.

Los hongos prosperan en el intestino sano, pero también pueden causar un daño intestinal que puede contribuir a la enfermedad inflamatoria intestinal (EII), según este estudio Adaptive immunity induces mutualism between commensal eukaryotes (La inmunidad adaptativa induce el mutualismo entre eucariotas comensales) publicado en la revista Nature.

Los expertos han llevado a cabo experimentos con ratones que muestran que normalmente el sistema inmunológico mantiene a los hongos bajo control. Sin embargo, cuando el sistema está desequilibrado, es más probable que ocurra una enfermedad.

“Los hongos han sido totalmente subestudiados en parte porque son superados en número por las bacterias”, asegura June Round, profesora de patología en la Universidad de Utah y autora principal del estudio. Ahora, nuevas herramientas y tecnologías están comenzando a hacer posibles investigaciones como esta sobre los hongos, lo que amplía el conocimiento sobre el funcionamiento de la microbiota intestinal.

Estos conocimientos abren nuevas vías para desarrollar terapias para mejorar la salud intestinal. El estudio muestra una prueba de que, algún día, las vacunas podrían usarse para frenar las enfermedades gastrointestinales mejorando las respuestas inmunitarias naturales que fomentan un equilibrio saludable de hongos y otra microbiota intestinal.

CandidaRound se interesó en esta línea de investigación después de probar que una prueba médica común para diagnosticar la enfermedad de Crohn también funciona para detectar anticuerpos contra hongos. Y, sin embargo, aún no se había explorado cómo los anticuerpos afectan la influencia de los hongos en la enfermedad.

Para profundizar, su equipo buscó el desencadenante de la respuesta inmune. Trabajando con muestras de pacientes y realizando pruebas con ratones, determinaron que la levadura Candida albicans, una de las principales especies de hongos que residen en el intestino humano, provocó la respuesta inmune más fuerte. Investigaciones posteriores mostraron que los anticuerpos se concentraron en tipos de células fúngicas alargadas llamadas hifas, que se unen específicamente a proteínas llamadas adhesinas que ayudan a que los microbios se adhieran a las superficies y se vuelvan invasivos.

Con este objetivo en la mano, los investigadores podrían probar de manera más definitiva el papel de los hongos en la salud intestinal. Descubrieron que los ratones poblados con la levadura en su estado normal permanecían sanos. Por el contrario, los ratones poblados con Candida en su forma invasiva causaron un daño intestinal que se parecía a la Enfermedad Inflamatoria Intestinal.

La EII no es la única condición de salud asociada con los hongos. Otras son las infecciones vaginales por hongos. Los investigadores determinaron que una vacuna que se estaba investigando como remedio para la candidiasis provocó una reacción inmune contra las proteínas adhesinas que es similar a la reacción en los pacientes de Crohn. Cuando se inocularon con la vacuna, los ratones normalmente propensos a una enfermedad similar a la EII tenían menos probabilidades de desarrollar la enfermedad.

Los investigadores ahora están investigando si las vacunas podrían ayudar a mitigar la EII en las personas, y si el mismo enfoque se puede aplicar de manera más amplia para dar forma a otras comunidades microbianas en el intestino. “Nuestro objetivo es aprovechar las interacciones con los microbios comensales y el sistema inmunológico del huésped para aprovechar los productos microbianos para las terapias”, dice Round.

Competencia saludable

Además de las implicaciones para la enfermedad, los hallazgos también sugieren que los hongos pueden ser importantes en el intestino sano. Por lo general, el trabajo del sistema inmunológico es eliminar las infecciones eliminando los organismos invasores. En este caso, los hongos se benefician de su interacción con los anticuerpos. La reacción inmune empuja a los hongos desde su estado invasivo a su estado redondeado y en ciernes, lo que mejora su supervivencia en el intestino.