El conseller Jordi Turull plantó cara al magistrado Pablo Llarena cuando este lo citó a declarar el pasado 18 de abril: "Usted me impidió someterme a la segunda sesión de investidura". El Matí de Catalunya Ràdio ha tenido acceso a un monólogo cargado de reproches dónde Turull se dirige aLlarena sin tapujos y lo acusa de la obstrucción de la justicia a las instituciones catalanas.

"Hasta donde yo sabía era una competencia del Parlament a propuesta de los grupos parlamentarios. Quien tendría que hacer política en relación a lo que pasa en Catalunya, que es el gobierno del estado, es quien nos dice cuando, como y de qué seremos juzgados y condenados", critica por una parte al mismo tiempo que asegura que "Quién tendría que impartir justicia, señoría, nos dice como y con quien tiene que ser el retorno del autogobierno de Catalunya. Señoría, eso es un auténtico cruce de poderes".

El conseller de la Presidència del gobierno de Puigdemont pronunciaba estas palabras cuando hacía 27 días que estaba en la prisión de Estremera, donde entró el 23 de marzo, al día siguiente de la primera sesión de su debate de investidura y quedando imposibilitado de participar en una segunda votación.

"Señoría, este proceso no va de impartir justicia, y menos con todas las garantías. Este proceso va de política y va de escarmentar", sigue diciendo Turull en este speech ante el juez. De la misma manera, lamenta "un ataque a los pilares básicos del parlamentarismo democrático".

Finalmente, Turull subraya que el juez Llarena lo ha convertido "en un preso político" porque "sabe que habría podido ser presidente de la Generalitat", no acaba sin recordarle al magistrado que nunca dejará de ser independentista y nunca dejará su compromiso político.

Después del contundente discurso del conseller, Llarena le indica que "el auto de procesamiento será revisado. Y revisado con rigor". El juez acaba la vista con un: "Muy bien. Buenos días".