El exalcalde de Badalona, Xavier Garcia Albiol, se ha presentado esta mañana al desalojo de una nave donde estaban un centenar de personas en esta ciudad. La presencia de Albiol ha sido motivo de fuerte tensión, y algunos de los desalojados se han encarado al dirigente del PP, que ha necesitado el apoyo de los Mossos.
Garcia Albiol ha manifestado después en la red que había recibido una agresión, cosa que no se ha podido comprobar en las imágenes, y "se ha mostrado muy satisfecho del trabajo hecho por su gobierno municipal para conseguir la desocupación". "Seguiremos trabajando para los vecinos de Badalona", ha añadido.
Como podéis ver y escuchar, hoy he recibido una agresión, además d insultos y amenazas, d los ocupantes d la nave y los q le dan apoyo. Aun así, muy satisfecho dl trabajo realizado durante mi gobierno para conseguir esta desocupación. Seguiremos trabajando x los vecinos #Badalona pic.twitter.com/RykgCvTOmD
— Xavier García Albiol (@Albiol_XG) January 13, 2022
Los Mossos d'Esquadra han cargado esta mañana contra los manifestantes que intentaban frenar el desalojo de un centenar de personas de una nave en Badalona. Unas 17 unidades de los antidisturbios de la policía catalana, por mandato judicial, han actuado este jueves por la mañana en la calle Progrés de la ciudad.
Unas 70 personas se han concentrado ante la nave ocupada por unas 100 personas en la calle Progrés de Badalona para intentar impedir el desalojo, que estaba previsto para las 10 horas. Los manifestantes han coreado consignas como "este desahucio lo pararemos" y "derecho a techo". Por su parte, las personas que habitan la nave han sido reunidas desde las 6 horas a la espera de un intento de acuerdo con la propiedad, la Sareb, para suspender el desalojo hasta que encuentren otro lugar donde vivir.
Efectivos de los Mossos d'Esquadra durante el desalojo de la nave de Badalona | Carlos Baglietto
Dos juzgados de Badalona habían señalado este jueves para el desalojo de la nave donde se trasladaron la mayoría de los habitantes que malvivían en una antigua fábrica que se incendió en diciembre del 2020, en un incidente en el que murieron cuatro personas. El colectivo había pedido a la justicia que les dejaran pasar a cubierto el frío intenso del invierno y la sexta ola de la covid con el compromiso de abandonar el local antes de acabar el mes de marzo, pero el juzgado ha rechazado la propuesta, desatendiendo la mediación del Ayuntamiento y las razones de la defensa de los ocupantes que representa la abogada Sònia Olivella, del colectivo Baula. "Las administraciones no han hecho nada por ellos para ofrecerlos una respuesta digna", se queja.