Contra el feminismo, contra la inmigración, contra los homosexuales, contra los animalistas, contra las ONG que salvan vidas en el Mediterráneo y, como no, contra el independentismo. El jefe de filas de VOX, Santiago Abascal, no ha defraudado durante su turno en el debate de investidura y ha repartido a diestro y siniestro. En el minuto uno ya ha advertido a Pedro Sánchez que no tendrá el apoyo de su partido, porque son "el grupo parlamentario más alejado del PSOE". A partir de aquí se ha dedicado a atacar la línea de flotación del actual modelo de Estado, en todos sus aspectos.

Escuchar a Abascal en la tribuna de oradores del Congreso de los Diputados ha sido un auténtico salto al pasado. Ha denunciado que la formación de ultraderecha que él encabeza sufre "un violento apartheid que es una amenaza para la democracia". Según su versión de la actualidad, VOX vive en un estado de permanente demonización por parte de lo que ha calificado de "sofocant dictadura progre". Y ha dedicado insultos a todos los colectivos que tienen en el punto de mira. Así, por ejemplo, ha definido el feminismo como "un movimiento de ideología totalitaria y suicida" y las ONG como los "colaboradores necesarios de las mafias de inmigrantes".

Sobre el acuerdo al cual aspira Pedro Sánchez para revalidar la presidencia, Abascal ha advertido que se trata de un Frente Popular con un doble objetivo, "la ruptura de la soberanía nacional y el cambio de régimen". En la misma línea, ha criticado que el PSOE opte por entenderse con "los amigos de Otegi, de Junqueras y de Maduro". Y ha dirigido un aviso "a los sediciosos, golpistas y terroristas: más allá de las promesas que hayan recibido, abandonen toda esperanza, porque no conseguirán sus objetivos". Una advertencia que ha complementado con una amenaza, que "España se pondrá en pie si ve amenazada su patria, porque España no ha llegado hasta aquí para ser derrotada por un grupo de sediciosos y fanáticos".

Fiel a su programa, gracias al cual han obtenido 24 diputados, el líder de VOX ha exigido que se ilegalice a los partidos independentistas y ha resucitado a ETA. "Queremos saber el contenido de las negociaciones de Zapatero con ETA, si el PSOE de Zapatero puso en marcha una operación para blanquear el terrorismo, entregar Navarra al separatismo o promover una reforma de la Constitución para incluir el derecho de autodeterminación".

"Rivera, Casado, escuchen, son la ultraderecha"

Sánchez ha querido hacer uso de su turno de réplica. No tanto para enmendar el discurso de VOX, que también, sino sobre todo para lanzar un mensaje contundente al PP y Cs. "Señor Rivera y señor Casado, escuchen, eso es la ultraderecha, su socio en Murcia, en Castilla y León o en Madrid, una anomalía europea". Por todo ello, el candidato a la presidencia les ha pedido a ambos que "reconsideren el cordón sanitario" que sus respectivos partidos han colocado al PSOE y lo pongan donde tiene que estar, en la ultraderecha, como hacen sus socios en Europa, tanto los liberales como el PPE.