El conseller de Cultura, Santi Vila, ha expresado este martes que sería "una decisión desproporcionada, traumática y de carácter violento" que el Juzgado oscense "fuera más allá" y lo sancionara y/o hiciera ejecutar el retorno de los bienes de Sixena que todavía permanecen en Catalunya. Ante la advertencia sobre posibles responsabilidades penales derivadas del incumplimiento de una orden judicial, Vila ha asegurado que se mantienen "firmes" en el cumplimiento de la legalidad, hasta donde permite el marco patrimonial catalán.
En este sentido, el conseller ha recordado que ya se ha cumplido parcialmente la sentencia pero que las 46 obras pendientes no pueden salir del país mientras sigan catalogadas. Vila ha indicado que la decisión de retornar o no las obras provisionalmente no es suya y que necesita del acuerdo "colegiado del Govern".
Santi Vila ha reiterado que dar cumplimiento a resolución judicial "choca abiertamente con la legislación catalana desde el punto de vista de patrimonio" y ha apelado a la necesidad de un acuerdo de Govern explícito sobre esta cuestión antes de poder autorizar o no el retorno de las obras de arte pendientes. Eso es, las 46 que se encuentran en el Museo de Lleida y dos más que se encuentran presuntamente en el MNAC aunque su director, Pepe Serra, haya reiterado que ni las custodiaban ni saben dónde están a día de hoy.
Sorprendido por la "virulencia" del juez
En todo caso, el conseller se ha mostrado sorprendido ante "la virulencia" del juzgado oscense para hacer cumplir una ejecución provisional de sentencia que ha considerado "no lo bastante cuidadosa con un marco legislativo en materia patrimonial y cultural". Vila ha dicho que se mantendrán "firmes", pero que tampoco se cansarán de dar al juzgado argumentos "de tipo cultural, patrimonial e incluso social y político para hacerle ver que ir más allá en relación a esta cuestión en Lleida sería un acto desproporcionado, traumático y de carácter violento".
Al respecto, el conseller ha dicho que "desconoce las medidas punitivas" concretas que podría tomar el juzgado, en virtud de la advertencia que ha hecho este martes. En todo caso, Vila ha admitido que en estos momentos no puede asegurar que no habrá "ninguna acción violenta por parte del juzgado en relación al Museo Diocesà y Comarcal, como enviar a la policía". Un extremo que el conseller de Cultura consideraría "del todo desproporcionado e inadmisible", entendiendo que todavía no hay una sentencia firme sobre este litigio.
"Nuestra posición sólo puede ser reiterar que nuestra voluntad ha sido siempre dar cumplimiento a las resoluciones judiciales", se ha defendido Vila, decidido no obstante a hacer ver en el juzgado que "más allá del conflicto civil hay un marco patrimonial catalán que vincula al conseller de Cultura". La decisión de acceder al retorno provisional de las obras no es "personal ni discrecional", ha insistido antes de concluir que "cualquier decisión que se tenga que tomar a partir de ahora" en relación a esta cuestión, se tiene que acordar en el sí del Govern. Autorizar o no la salida de las obras del país "necesita la decisión colegiada del Govern, ha "concluido".