Red Eléctrica de España (REE) se sacude de toda la responsabilidad del apagón general del pasado 28 de abril y señala a las eléctricas por no cumplir con su obligación de regular la tensión. El operador del sistema, que ha presentado su propio informe, asegura que la planificación operativa del día anterior fue adecuada y suficiente para garantizar la estabilidad de la red. La presidenta de REE, Beatriz Corredor, ha asegurado que fueron las compañías eléctricas las que no respondieron como debían ante las condiciones de tensión. "Efectuamos todos nuestros estudios de análisis siguiendo la premisa que el resto de sujetos del sistema cumplirán con sus funciones", ha añadido. En este sentido, Corredor ha asegurado que "si las eléctricas hubieran cumplido con su obligación de control de tensión, el sistema no habría colapsado". “Incluso añadiendo un ciclo combinado más a la operación del día 28, el sistema igualmente habría caído”, subrayó Sánchez. Según Beatriz Corredor, su informe "es compatible con el del Gobierno" y, de hecho, "lo complementa", ha afirmado.
Origen: una fotovoltaica en Badajoz
La Red Eléctrica (REE) ha situado el origen del apagón general del pasado 28 de abril en "el mal funcionamiento" de una planta fotovoltaica en Badajoz que tiene "perfectamente identificada", pero por cuestiones de "confidencialidad" no lo ha revelado. Este error provocó una "oscilación forzada de frecuencia" que el informe del Gobierno considera anómala. En una rueda de prensa este miércoles, la directora general de Operación de REE, Concha Sánchez, ha situado el inicio del incidente a "las 12 de la mañana del 28 de abril", momento hasta el cual el sistema "era absolutamente normal" y ha indicado que no había indicios "de lo que después iba a suceder". Según ha detallado, a las 12.03 horas "el sistema empezó a sufrir una oscilación forzada de frecuencia" que provocó una "bajada del nivel de tensión" y una fluctuación "muy importante" que se alargó durante 5 minutos y necesita una actuación "inmediata" porque es una situación peligrosa.
Alteración de la línea eléctrica
Sánchez ha explicado que después de observar una "alteración importante" en una línea eléctrica en Badajoz se decide reducir el intercambio con Portugal. El problema fue cuando la oscilación se repitió a las 12.16 horas. "Seguimos desconectando reactancias para mejorar el nivel de tensión en el sistema" que procede de la planta de Badajoz "que está conectada en la red de transporte". Según Sánchez, esta oscilación "inequívocamente" se debería "a un mal funcionamiento de los controles internos" de la planta. Pero esta cuestión "lógicamente tendrá que ser aclarada por el propietario". En este sentido, ha detallado que después de estas constantes oscilaciones se observa un "crecimiento anómalo" de la demanda que "en realidad es una desconexión de generación" y aquí se produce el fenómeno de sobretensión.
Sánchez ha relatado que se desconectan 700 MW de pequeñas instalaciones sobre las cuales REE "no tiene visibilidad, incluyendo plantas de autoconsumo" y el flujo de la exportación se reduce, pero siguen incrementándose las tensiones y se produce una subestación en Granada. A partir de aquí, se producen una serie de desconexiones y cuando ya se había desconectado más de 2.000 MW a la red de transporte y "un volumen considerable" en redes de distribución, "ya no fue posible que el sistema mantuviera sus niveles de tensión".
Información parcial
REE ha sido una de las empresas señaladas en el informe del Gobierno que reparte culpas entre el operador del sistema por una "mala planificación". La presidenta de Redeia, Beatriz Corredor, ha explicado que es "clave" tener en cuenta que el operador, que tiene que ejercer sus funciones con "transparencia, objetividad y eficiencia económica": "al mínimo coste". Corredor, ha acusado este miércoles en las eléctricas de no haber facilitado toda la información requerida por su filial Red Eléctrica para investigar las causas del apagón y de no haberla remitido con la calidad deseable. "Los puedo asegurar que no toda la información recibida de estas terceras partes ha tenido la calidad deseable ni ha sido tan completa como hubiera sido necesario", ha dicho Corredor.
Corredor también ha insistido en que Red Eléctrica, como operador del sistema, no gestiona las redes de distribución, sino que lo hacen los distribuidores en su monopolio territorial, ni tampoco gestiona las redes privadas o los centros de control distribuidos por toda España. Según ha explicado, la entidad recibe los programas resultantes de los diferentes mercados de electricidad gestionados por el Operador del Mercado Ibérico de Energía (Omie) en los que se plasman los acuerdos económicos entre los que ofrecen y los que compran electricidad para cada hora del día siguiente. Con este programa así establecido, Red Eléctrica tiene que comprobar que es "compatible con la realidad de la física", es decir, con los criterios de seguridad establecidos. "Eso es lo que se dice gestionar los servicios de ajuste, que incluyen los servicios de balance y la famosa resolución de restricciones técnicas," ha explicado Corredor.
"Red Eléctrica no produce electricidad, no comercializa electricidad, no fija el mix energético, no establece los precios, ni gana dinero por el precio de la electricidad que transporta por su red", ha insistido. Corredor ha añadido que la actividad de Red Eléctrica es "un servicio público estratégico": garantizar el sistema para que funcione en perfecto equilibrio. Corredor ha recordado que "no es nuestra competencia la depuración de responsabilidades".