Rajoy ha calificado de antidemocrático e ilegal el proceso de aprobar las leyes de transitoriedad que ha tenido lugar en el Parlamento de Catalunya. Lo ha hecho ante un encuentro de los alcaldes del PP celebrado en Zaragoza. Ha afirmado que actuará cumpliendo su obligación y su deber: haciendo que se aplique la ley. "Haré todo el necesario para que no haya referéndum, porque es mi obligación". "Lo más importante que me han encargado los españoles es que preserve la unidad nacional", ha afirmado Rajoy, y ha calificado la soberanía nacional de "clave de bóveda sobre la que se construye la nación".

Interpretación de los hechos

Rajoy ha formulado entre aplausos su visión de los últimos acontecimientos en Catalunya: "¿Qué ha pasado a Catalunya esta semana? Que se ha liquidado el Estado de derecho. El objetivo final es que España deje de ser España ". Rajoy ha cargado contra los soberanistas: "Los diputados [soberanistas] han actuado a la brava. Han pasado por encima de los derechos de casi la mitad de los diputados. Se ha querido suprimir la soberanía nacional...". Rajoy ha criticado el procedimiento de aprobación de las leyes: "Se ha hecho en 12 horas lo que en otros parlamentos dura meses".

Amenaza con contundencia

Rajoy ha asegurado que "España sigue siendo un Estado de Derecho, donde la ley se cumple." Y ha advertido que apoyarán las actuaciones de los jueces y de la fiscalía. Ha presumido de la fuerza del Estado, y ha advertido a los partidarios del derecho a decidir: "Están despreciando la fuerza de la democracia española y la determinación de las principales fuerzas españolas con el apoyo de la inmensa mayoría de los españoles". Finalmente, ha insistido en que el referéndum no se celebrará.