Otra vez más. Emmanuel Macron se doctoró en el cierre del G-7 de Biarritz. El Mundo es el diario que le otorga la condecoración más notable en portada, dado que lo presenta como el hombre que convenció a Donald Trump de aflojar en sus peleas con China e Irán. Tiene mucho mérito conseguir que un hombre tan mercurial como el presidente norteamericano haya ahorrado al mundo el numerito Ahora-No-Respiro del año pasado. Macron se merece estas portadas que le dedican, aunque mañana quien sabe qué pasará. La diplomacia internacional es como una Champions perpetua, donde las eliminatorias no acaban nunca, o una competición de esgrima, donde ahora puntúa uno y después el otro. Hoy ha ganado Macron. Mañana... vete a saber.
La mayoría de portadas escogen la foto del Macron feliz y seguro, con el pulgar arriba en homenaje a Trump, mientras éste hace cara de no estar muy contento. Quizás sus instintos le dicen que lo han engañado, que hay una mosca en la sopa. En La Vanguardia, que selecciona una foto más general, se ve el mismo panorama. Es casi la imagen al revés del año pasado: todos los líderes ansiosos rodeando un Trump reticente que disfruta la rabieta de no querer firmar la declaración conjunta.
Por curiosidad y contexto, los diarios franceses también ovacionan a Macron para restaurar esta nueva grandeur francesa en el tablero internacional. "En la conferencia de prensa con Donald Trump, el presidente francés afianza la posición de Francia en la reunión cara a cara entre Estados Unidos e Irán", dice Le Monde, el diario liberal progre a la web. Libération, referente de la izquierda, también se apunta: "Macron: G7 et match" que en francés suena como "Macron: set y partido". Además, este diario hace una edición dedicada a los bosques. El conservador Le Figaro hace sonar una nota de duda: "Irán: La maniobra de Macron, ¿un golpe publicitario o un golpe de genio?".
No todo el mundo se apunta a aplaudir al presidente francés. ABC vuelve a subir a la montaña con espíritu trabucaire para castigar a Pedro Sánchez. La Razón te pone al día del enredo jurídico del traslado de los despojos de Franco. El Punt Avui destaca las carrerillas de JxCAT y ERC para disimular las disputas de estos días con el fin de no hacer daño a la Diada.
