El president en el exilio, Carles Puigdemont, ha recibido una invitación para visitar el martes el Parlamento de Bélgica, y celebrará una reunión informal con la comisión de Exteriores de la Cámara, según informa el diario Le Vif. Es previsible que Puigdemont explique allí la situación de los presos políticos, y especialmente la huelga de hambre que han iniciado Jordi Sànchez y Jordi Turull. La huelga de hambre ha causado gran impacto en Bélgica, hasta el punto de que el ministro de Defensa, Sander Loones, se ha solidarizado con ellos.
"Puigdemont participará en un desayuno en el restaurante del Parlamento belga, que recorrerá en una visita guiada. El programa también incluye una "audiencia informal" de una delegación catalana en la comisión de Exteriores de la Cámara. Este punto no figura en el orden del día oficial de la reunión de la comisión el martes", señala el diario.
Puigdemont también visitará después el Parlamento de Flandes, y posteriormente está previsto un contacto con la prensa.
El reconocimiento de las instituciones belgas y flamencas al Govern en el exilio han provocado en los últimos meses fuertes polémicas con el ministro de Asuntos Exteriores español, Josep Borrell, hasta el punto de que Flandes retiró a su delegado en España. A causa de las presiones españolas, el Parlamento belga no aceptó hace nueve meses la propuesta del partido flamenco N-VA para que Puigdemont hablase ante el legislativo belga. Ahora los partidos belgas han aceptado esta solución.