El president, Carles Puigdemont, recibe a El Nacional a primera hora de la tarde del viernes en Bruselas. Llega al café del hotel en el que hemos sido citados enfundado en el abrigo negro con el que se le ha visto paseando por las calles de esta capital europea donde se está convirtiendo en un invitado muy popular. Desde el exilio belga el president se está preparando para la campaña más sorprendente que ha vivido nunca el Parlament y está dispuesto a luchar, con un punto de indignación, contra la suspensión de la autonomía y contra todas aquellas formaciones que la apoyan —el clan del 155, ironiza—. Es consciente de las dificultades de este pulso desigual pero también de la oportunidad de conseguir un nuevo aval democrático. Puigdemont reivindica su Govern, la proclamación de la República hecha en el Parlament y la vigencia del 1-O y niega que ninguno de los miembros de su ejecutivo se haya comprometido a acatar el 155. Deja claro que las espadas están en alto y que está dispuesto a enfrentarse con quien haga falta, incluidos los grandes grupos de comunicación españoles a los que acusa de actuar de altavoces del discurso del Estado.

Las formaciones independentistas han decidido concurrir a las elecciones del 21-D. ¿Lo han decidido porque es la única salida posible?
Hay una razón de fondo, nosotros, a diferencia de la banda del 155, no hemos denigrado nunca las urnas, y a cada oportunidad democrática que hemos tenido delante no sólo lo hemos aprovechado, sino que hemos ganado siempre. No hagamos como ellos que ante propuestas de urnas, selectivamente las rechazan cuando no les convienen. No rechazamos nunca las urnas, al contrario, los derrotaremos en las urnas, como hasta ahora. La segunda razón, es que, para nosotros, la prioridad más absoluta es derrotar el golpe de estado, derrotar a la banda del 155, Iceta, Arrimadas, Albiol, Rajoy, que pierdan claramente las elecciones, y, por lo tanto, se comprometan a aceptar el resultado de los catalanes, y si el resultado es una bofetada al 155 y a todos ellos, aparte de tomar las decisiones que tengan que tomar políticamente, si creen que tienen que dimitir o no, lo que tienen que hacer es comprometerse a aplicar el resultado, que es anular aquella misma noche el 155. ¿Se comprometerán o no? ¿Aceptarán el resultado democráticamente explicitado con sus reglas del juego, con las garantías que ellos dan, que ya veremos si son las que tienen que ser, aceptarán el resultado? ¿Anularán el 155 aquella misma noche, sí o no? Es fácil de responder.

Hay democracia más allá de la Constitución. ¿O no es democrático defender la República española?

El delegado del Gobierno en Catalunya, Enric Millo, ha dicho que aunque levanten el 155 no comporta que la intervención económica acabe, y el mismo Mariano Rajoy dijo la semana pasada en Barcelona que hablará con todo el mundo pero siempre dentro de los límites de la Constitución y la ley. Da la sensación que damos vueltas a una historia ya conocida...
Lo que venga de la banda de mentirosos de Madrid tiene relativa importancia, porque el señor Rajoy, que es el señor de no a todo, de no puedo ni quiero hablar, es evidente que no quiere hablar de nada. Alguien le tendrá que explicar que hay democracia más allá de la Constitución. ¿O no es democrático defender la República española? ¿Son unos antidemócratas los que defienden la República española, porque no está prevista en la Constitución? ¿Son antidemócratas los que defienden la eutanasia? Pregunto. A veces parece que nos creemos con normalidad lo que esta banda de gente va definiendo como democracia, y al final acabará siendo una democracia orgánica. ¿Es o no democrático una expresión que no esté contemplada en la Constitución pero que se haga por vías democráticas, que quiere decir con respecto a la decisión de la gente y no violenta? ¿La defensa de la República española es o no democrática? Parece que con las palabras del señor Rajoy no se pueda hablar de eso. Del señor Millo ya he dicho lo que pensaba. Un mentiroso compulsivo como el señor Millo no tiene ninguna autoridad moral ni para hablar en nombre de las instituciones catalanas, ni para tomar ninguna decisión en nombre de las instituciones catalanas. El pueblo de Catalunya no ha autorizado el PP a tomar decisiones, de nada, ni de Sijena ni de la economía. Si el pueblo catalán el 21-D vota mayoritariamente para derogar el 155, qué autoridad moral puede invocar para mantener el bloqueo económico de las cuentas de la Generalitat, que, por otra parte, es ilegal.

Usted defendió reeditar una lista unitaria, pero no ha sido posible... Finalmente ha hecho una lista con la marca Junts per Catalunya, ¿está satisfecho con la lista?
Muy satisfecho con la respuesta, la disposición que hubo de muchísima gente que enseguida entendió el mensaje. Las listas son el primer discurso de un proyecto político y, a partir del discurso que emite la lista, la gente puede entender lo que nos proponemos.

El PDeCAT ha tenido una gran generosidad al incorporarse al proyecto de JuntsXCat

Este discurso, sin embargo, no gustó a algunos miembros del PDeCAT que interpretaron que se les dejaba de lado...
La perfección no existe. Seguro que una lista hecha por el propio PDeCAT tampoco habría gustado a todo el PDeCAT, y cuando hablo del PDeCAT podría hablar de ERC o de la CUP. Estaríamos en sociedades que no serían democráticas, si no hubiera discrepancia y contraste de opiniones. Lo que es evidente es que el PDeCAT ha tenido una gran generosidad al incorporarse en este proyecto, como lo ha tenido mucha otra gente. En general todo el mundo ha leído muy bien de qué iba esta lista, los que participan, el PDeCAT, la gente que no ha hecho nunca política, la gente que se ha movilizado en favor de la unidad, es una lista que fácilmente la puede votar gente que ha votado otras opciones políticas tradicionalmente. No es una lista que apele a sólo un aspecto de los votantes potenciales del soberanismo, apela a todos y por lo tanto me siento muy satisfecho.

¿Tendrá continuidad JuntsXCat o es sólo una plataforma de cara al 21-D?
Estamos tomando decisiones en circunstancias muy excepcionales. Estoy en Bruselas, pronto hará un mes, con un acoso por parte de los medios de comunicación españoles, la Justicia española actuando como una justicia de venganza, más de medio Govern en la prisión, con evidentes dificultades... No nos podemos plantear el análisis de la situación como nos planteamos en términos normales. No he mirado si es un proyecto de un partido político. No es justo ni hacer la pregunta, estamos en un momento de emergencia nacional, muy difícil, tenemos que hacer todo lo que podamos para parar esta regresión democrática, esta agresión a las instituciones catalanas. Si esto pasa porque hoy la mejor herramienta es una lista lo más transversal posible, hoy pide eso, ¿pero quiere decir que dentro de tres meses será esta la herramienta? No lo sabemos. No está hecho con vocación maquiavélica de decir a partir de aquí haremos no sé qué, es exactamente lo que hay. No hay nada más que eso. Es lo que toca hacer ahora, como respuesta más eficaz y efectiva a este golpe que nos han querido infringir el clan del 155.

¿Realmente daremos por normal unas elecciones que se hacen en estos términos y estas condiciones? Yo no

Es una campaña muy importante, en unas condiciones extraordinarias, ¿Cómo podrá participar?
Estamos intentando hacer análisis de normalidad, con una anormalidad extraordinaria. Y daremos por bueno que haya candidatos que estén en la prisión o en el exilio, que no tengamos igualdad de condición ni de trato por los medios de comunicación, públicos y privados españoles. ¿Daremos por normal eso? ¿Realmente daremos por normal unas elecciones que se hacen en estos términos y estas condiciones? Yo no. Haremos lo que podamos. Y obviamente, si el Gobierno español me garantiza, y lo invito a que nos garantice a todos los candidatos igualdad en las oportunidades de defender nuestros proyectos que tiene todo el mundo, encantado de mañana mismo ir a Barcelona a hacer la campaña, encantado, pero no depende de mí eso.

Se encontrará con problemas, como por ejemplo, los debates de candidatos. ¿Cómo se lo hará?
Yo se lo preguntaría a ellos. ¿Aceptarán un debate de candidatos en el cual un candidato no pueda ir a debatir? ¿Lo aceptará todo el mundo con normalidad eso? Me niego a normalizarlo. Por lo tanto, les pido: hagan lo que sea, lo que está en sus manos, que es mucho, mucho y ya saben porque lo digo, hagan lo que está en sus manos. Ellos que estaban tan preocupados por las garantías de los diputados en la reforma del reglamento del Parlament, ¿las garantías de los candidatos les preocupan ahora sí o no? Ayudarán a que todos los candidatos tengan las mismas garantías y la protección de la que ellos disfrutan. Ya no espero el apoyo mediático del que disfrutan, y ya no hablo de la financiación.

¿Qué quiere decir cuando dice que ya saben lo que tienen en sus manos?
Porque tienen mucha fuerza. Ellos tienen mucha y mucha fuerza.

No ha sido posible hacer una lista unitaria pero sí unos puntos comunes...
Eso ya venía de antes, de la lista mía, de las conversaciones PDeCAT, ERC, CUP.

Una de las cosas que más se ha destacado en estos puntos es que parece que se aparta la vía unilateral y se apuesta por una negociación bilateral con el Estado.
Yo ya había privilegiado siempre en la propuesta de referéndum acordado y en el despliegue de los efectos del referéndum por la bilateralidad. En los puntos que le entrego al presidente Rajoy la primera vez que nos vemos, este es uno de los elementos a reivindicar. ¿Eso tiene que excluir alguna otra posibilidad? De ninguna manera. Sobre todo cuando delante tenemos un Estado que actúa unilateralmente. ¿O es que el 155 ha sido dialogado, ha sido bilateral? Damos un poco de risa a veces. Tenemos un Estado que nos aplica con toda la contundencia y toda la ilegalidad su unilateralidad, porque el 155 es un acto unilateral, ¿no? Y nosotros tenemos que decir no, democráticamente renunciamos a una vía democrática. No tenemos que renunciar a nada, a priori. No quiere decir que no privilegiemos una estrategia. Todos estamos de acuerdo en eso. Claro que tenemos que privilegiar, incluso en estas situaciones, que una parte del Govern está en la prisión y otra fuera, claro que la prioridad es el diálogo y la negociación. Por descontado. Y eso requiere bilateralidad. Claro que sí.

No podemos renunciar a la unilateralidad si el Estado no renuncia a su unilateralidad

Eso no quiere decir que se renuncie a otras vías...
Es que no podemos renunciar si el Estado no ha renunciado a su unilateralidad. El Estado dice: renuncio a la unilateralidad, y por lo tanto, renuncio a la violencia, a imponer unilateralmente el 155, a la unilateralidad del TC, a pedir la suspensión de todo lo que recurre al TC... Pero es que en frente tenemos a un Estado que actúa de manera unilateral. ¿Tenemos que ir con el lirio en la mano mucho tiempo más o no? Que el Estado español renuncie a la unilateralidad. Entonces hablaremos en otros términos.

¿Qué quiere decir?
Pongo un ejemplo, si ahora en las elecciones legislativas españolas ganara un partido que fuera republicano y en su programa electoral dijera: "proclamaré la República si tengo más votos que los partidos monárquicos", y va y gana. ¿La proclamación de aquella República será un acto unilateral o lo tendrá que negociar con el Rey? ¿Será inconstitucional y se arriesgará a estar 30 años en la prisión? ¡Porque no es constitucional! ¿Tendrá que hacer una ponencia constitucional de reforma de la Constitución para que en al cabo de no sé cuántos años pueda haber una constitución que entonces sí diga que España es una república? ¡No hagamos reír! Si hay un partido republicano español que gana las elecciones, y las gana en votos, es un plebiscito. Y no creo que pueda nadie justificar que al cabo de una semana, España pueda ser considerada una monarquía. Por lo tanto, será un acto dicen unilateral para quitarle valor y prestigio, ¿pero qué tendremos que hacer? ¿Una negociación bilateral con la monarquía?

No podré votar. Prefiero mantener la libertad de movimiento y la defensa de la posición de la institución

¿No podrá votar en estas elecciones, president?
No podré votar. Habría podido votar si hubiera sido detenido. Pero prefiero mantener la libertad de movimiento y la defensa de la posición de la institución que represento en las condiciones en las que me encuentro ahora que tristemente me impedirán votar.

Hay quien especula que se puede presentar en Barcelona el día de la votación...
No quiero entrar en especulaciones. No doy abasto...

Estamos cayendo en la estrategia de la clínica de rumores que ha fabricado España para contaminar nuestro marco mental

Depende de usted...
Están especulando sobre intenciones mías que ni siquiera yo me he imaginado. Eso es muy injusto y me crea mucha indefensión. Tengo que ir a remolque de las mentiras de lo que es exactamente la construcción del rumor como arma de guerra. Tira la mentira o la calumnia, que en la negación de la calumnia, encontrarás parte de la confirmación de esta calumnia y la credibilidad. Nos tenemos que dejar de chupar el dedo. Rasquemos un poco más. ¿Quién ha publicado que yo era un agente sionista que podía estar detrás, incluso, de lo que le ha pasado al fiscal Maza? Lo encuentro delirante incluso para la familia del señor Maza... ¿Alguien puede mirar quién paga estos confidenciales? ¿Los paga alguna de estas empresas que han deslocalizado su sede en Catalunya? ¿Los paga algunos fondos reservados? ¿De qué viven? De dónde sacan la información, alguien pregunta: diario tal, ¿de dónde saca la información que el señor Puigdemont es un agente sionista? No me puedo pasar la vida desmintiendo lo que son diseños de calumnias. No podemos estar todo el día así. Estamos cayendo en la estrategia de la clínica de rumores que ha fabricado España para contaminar nuestro marco mental.

¿Tomará posesión del escaño después de las elecciones?
Sí. Si salgo escogido y los ciudadanos quieren que sea diputado, tomaré posesión del escaño.

¿Se ve restituido en el cargo?
Es que no me veo destituido, para verme restituido me tendría que ver destituido y no lo estoy. No he sido destituido.

Si el pueblo de Catalunya y el Parlament lo deciden, aquello que me hace diputado y president no me puede llevar a la prisión

¿Contempla una investidura en el exilio?
Legalmente no es posible una investidura en el exilio. Lo que contemplo es una investidura en el Parlament de Catalunya. Si el pueblo de Catalunya quiere que yo sea diputado, si la mayoría parlamentaria quiere que yo sea president, lo que me ha hecho diputado y president no me puede llevar a la prisión. Es una contradicción muy bestia. Aquello que te lleva a ser president, un programa que genera la confianza de un Parlament votado democráticamente y con las reglas del juego del Gobierno español es aquello que te puede llevar cinco minutos después a ser detenido y a la prisión... Eso es una anomalía democrática que se tendría que resolver.

No he tomado la decisión de sí iré a tomar posesión

¿Quiere decir que irá a tomar posesión?
No he tomado la decisión. Pero lo que tendría que ser normal es eso. Si hay un mandato democrático que lo ve todo el mundo. Si yo soy diputado y puedo tener mayoría para ser investido president, ¿qué es lo normal? Que tome posesión de president. Y que haga el trabajo que me encarga el Parlament de Catalunya. Lo que es anormal es que yo con las mismas ideas y el mismo programa político que me llevan a ser president tenga que estar 30 años en la prisión. Eso es anormal.

Los ciudadanos tienen que saber si votando a determinado partido político estarán votando el 155

Se ha apuntado la posibilidad de que haya un Govern legítimo y un Govern ejecutivo. ¿Esta dualidad lo aceptaría?
Puede haber muchas fórmulas que permitan hacer compatible lo que es indiscutible por parte de una mayoría, que es cuál es el Govern legítimo de Catalunya. Eso no está en discusión ver cómo lo plasmamos. Pero, previamente a eso, querría oír un compromiso explícito de los candidatos, de todos, especialmente de los de la banda del 155, que si el pueblo de Catalunya quiere que en el Parlament haya una mayoría independentista y esta mayoría quiere investir de president una persona que está fuera, que se comprometan a que esta persona pueda tomar posesión del cargo. Porque sería una manera de respetar los resultados. Cuando digo que digan si están dispuestos a aceptar los resultados quiere decir eso. Creo que los ciudadanos merecen una respuesta antes de ir a votar. Tienen que saber si votando determinado partido político estarán votando el 155 pase lo que pase. Y no vale mentir. Es muy claro: ¿Sr. Iceta, usted pedirá la liquidación del 155 el día siguiente de unas elecciones en que el 155 pierde? ¿Sí o no, señor Iceta, sí o no? ¿Sra. Arrimadas, señor Albiol, se comprometen o no a respetar los resultados y, segunda cosa, si el Parlament de Catalunya tiene una mayoría que puede investir president a alguien que está viviendo fuera, se comprometen a respetar el resultado del Parlament? ¿O esta vez las garantías de los diputados de la mayoría no cuentan? ¿Las garantías de los diputados que quieren investir a una persona que tiene que vivir fuera porque si entra es detenida, las piensan respetar o no? Es muy sencillo de responder, no vale hacer circunloquios, es muy sencillo: ¿sí o no? Los votantes catalanes se merecen esta claridad, que lo expliquen, por favor, y que la gente, cuando vaya a votar, sepa qué está votando, no vale engañar a posteriori.

Se ha hablado de investir a Puigdemont, aunque no gane las elecciones...
Lo que es indiscutible es que si hay una mayoría independentista suficiente, Catalunya habrá enviado un mensaje colosal al mundo, y es que, a pesar de todo, y a pesar del permiso de Europa para que Rajoy haga lo que quiera y tenga barra libre para hacer lo que quiera para resolver lo que él considera que es un problema, habrá sido derrotado. Eso será una victoria impresionante y un mensaje al mundo. Si con detenidos, exiliados, con violencia, con golpe de estado del 155, con 10.000 policías, con persecución fiscal, con guerra mediática, guerra económica, aun así ganamos, el señor Rajoy tendrá que dar muchas explicaciones en Europa.

La proclamación de la República no ha sido desautorizada por nadie. El 1-O es vigente

¿Si ganan, dónde quedará la proclamación de la República que se hizo en el Parlament?
No ha sido desautorizada por nadie. El 1-O es vigente. Si el pueblo de Catalunya ratifica la voluntad expresada el día 1 y el día 3, ¿quién tiene derecho a no ser consecuente con esta decisión del pueblo de Catalunya? Vuelvo a poner el ejemplo de la República española. ¿A alguien le pasaría por la cabeza que después de que un partido político que defendiera la República española ganara por mayoría absoluta, se dijera tendremos que someter a consideración del TC o pedir un dictamen del Consejo de Estado? A nadie le pasaría por la cabeza, dejemos de hacernos según qué preguntas. Si el pueblo de Catalunya desmiente la versión española, las intenciones, y desautoriza y vence el golpe de estado del 155, qué tenemos que hacer, ¿aceptar el 155? Es evidente que no. ¿Quién manda en una democracia? Manda la gente. Ni el Consejo de Garantías, ni el TC, manda la gente.

Han conseguido cambiarnos el marco mental. Damos como normales cosas que son muy anormales

¿El Constitucional, sin embargo, tumbó aquella declaración? ¿Dónde estaremos?
Exacto. ¿Dónde estaremos? ¿Cómo describiríamos un Estado que permite que pase eso? Es el mismo caso que le decía de un partido republicano. El TC diría, y seguramente tendría razón, que la proclamación de la República española sería inconstitucional, y quizás encontrarían a un fiscal general del Estado que a la persona que hubiera proclamado la República le presentaría una querella por rebelión, y probablemente diría que las manifestaciones que le dan apoyo son tumultuarias y, por lo tanto, tienen violencia, y además, quizás también lo detendrían y lo llevarían a la Audiencia Nacional y lo llevarían a prisión preventiva porque podría reincidir en el delito... Han conseguido cambiarnos el marco mental. Lo que es anormal es eso. Damos como normal cosas que son muy anormales. Si el Estado español es un país en el que hay ciudadanos de primera y de segunda y según qué se vote vale y según qué se vote no vale, lo tenemos que saber antes de votar. Eso definirá un Estado que seguramente no será de los más ejemplares de las democracias del mundo.

Acatar el 155 no se le ha pasado por la cabeza a nadie. Querrían presentar a la gente que está en la prisión como una gente que renuncia

De todos modos, todos los miembros del Govern en la cárcel han tenido que acatar o admitir la vigencia del 155...
Ha habido una confusión muy grande con eso. Si alguien piensa que acatamos el 155 y que nos parece bien, es que no ha oído ni han leído ni han querido oír lo que han dicho los consellers que están en la prisión. No hay que confundir lo que es una legítima y comprensible estrategia de defensa con lo que son los compromisos y las decisiones políticas. No he visto a ninguno, vaya en la lista que vaya, ni el vicepresident ni los conselleres, diciendo que si están en el Govern de la Generalitat aceptarán el 155. Por favor, es una ofensa a su situación personal. No es eso lo que han dicho. Acatar el 155 no se le ha pasado por la cabeza a nadie en los términos que esta coalición, esta unidad en lo editorial querría que pasara. Querrían presentar a la gente que está en la prisión como una gente que renuncia... Eso es mentira y tremendamente injusto con su situación personal. Gente absolutamente comprometida con sacar adelante lo que el pueblo de Catalunya decide, como han hecho siempre.

¿En qué situación se ve usted?
Es difícil decirlo porque la situación es tan anómala que me niego a pensar en términos de normalidad. A mí me gustaría mañana estar en Catalunya y poder defender mis ideas en igualdad de condiciones como hacen los otros candidatos a la presidencia de la Generalitat. Y poder disfrutar del mismo respeto por parte de los medios de comunicación, al menos los públicos, y no tener que ver mi imagen asociada a la banda sonora de El Exorcista en TVE, que es una verdadera máquina de manipulación de la gente. ¿Pasará eso? Tristemente no. ¿Y ante eso qué tengo que hacer, resignarme? Tampoco. Combatir. Y pedir al pueblo de Catalunya que derrote el 155, que diga no al golpe de estado, que restituya la legitimidad democrática que nos encargó el 27 de septiembre del 2015. Eso lo tenemos al alcance, el pueblo de Catalunya dispuesto a defender la República, a defender pese a quien le pese en el Estado, está en condiciones de defender a través de los votos esta legitimidad. Pero yo me veo confrontado a un Estado que tiene tics cada vez más autoritarios. No es fácil y no quiero normalizar esta situación. Es muy grave. Y mirado desde Europa es mucho más grave. Entiendo que vivir allí cada día, puede llegar a banalizar un poco lo que está pasando, e incluso comprender. Es muy grave lo que ha hecho el Estado español. Se ha cargado la democracia. Y nos costó mucho poder recuperarla como para que ahora a través de un decreto ley la ventilen, con una decisión absolutamente ilegal e inconstitucional. ¿La misma convocatoria del pleno del Parlament de Catalunya, con qué ley se regula? Se respetará la ley que lo regula o un decreto del Govern español será suficiente. Porque la ley dice que el único que puede convocar el pleno de constitución del Parlament es el president de la Generalitat y ahora esta competencia se la ha arrogado el presidente Rajoy. ¿Exactamente en qué ley dice eso? Se ha cargado la ley para hacerlo. No estamos hablando de adoptar medidas para hacer cumplir lo que una comunidad autónoma no está cumpliendo, está quedándose con artículos de una ley que reserva al president de la Generalitat en funciones, que es lo que teóricamente tendría que ser yo si hubiera disuelto el Parlament, quien convoque el pleno de constitución del Parlament de Catalunya.

Iceta, después de tantas décadas en la política, tendría que hacer un buen servicio y es que si sale derrotado, si su coalición, la 155, sale derrotada, marcharse. Ya le toca

También el PSOE lo apoya, Miquel Iceta (PSC) ha dicho que no investirá a un president independentista, e incluso la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha dicho que espera explicaciones de por qué se ha marchado el president...
Me parece que es muy injusto que se nos pida explicaciones a los que están en la prisión o a los que estamos fuera. Creo que tendría que pedir explicaciones a gente que tiene muy cerca. Que también las esperamos, por cierto. Iceta, después de tantas décadas en la política, tendría que hacer un buen servicio y es que si sale derrotado, si su coalición, la 155, sale derrotada, marcharse. Ya le toca. No se puede ir siempre contra los intereses del pueblo de Catalunya. Si los intereses mayoritarios, por ejemplo, eran el Estatut, no se podía ir en su contra: si es derrotar el 155, no se puede estar a favor del 155. Si se quiere respetar la decisión del pueblo, evidentemente. A mí, lo que la coalición del 155 decida es una unidad también en lo constitucional. Es un mismo espacio político. Es lo mismo votar a PSC, que PP, que votar Cs. Hay una cosa por encima incluso de la democracia, es la unidad de España, es como una idea sagrada, religiosa. No hay diferencias. Son capaces de pactar con la derecha, si conviene, o de incorporarla a sus listas. Incluso a la derecha homófoba. Son capaces de todo. A la política catalana le conviene una renovación importante de liderazgos. Si el pueblo de Catalunya mayoritariamente quiere que en Catalunya haya una mayoría que sitúe al clan del 155 en la oposición, eso se tendrá que respetar.

Es lo mismo votar a PSC, PP, Cs. Hay una cosa por encima incluso de la democracia, es la unidad de España, es como una idea sagrada, religiosa.

¿Mantiene contacto con los miembros del Govern que están en la prisión?
Directamente es imposible. Muy difícil, vaya. Indirectamente sí, porque a través de abogados les hacemos llegar mensajes de ánimos y apoyo a todos. Sí, evidentemente.

¿Cuál ha sido el peor momento de este mes?
Ha habido muchos, pero creo que no toca ahora explicarlos, los explicaremos en su momento en el formato que creamos más apropiado.

¿Qué pensó al ver a uno de sus exconsellers como Santi Vila saludando el jueves como hizo a Mariano Rajoy?
Es un disgusto personal y una imagen de la vieja política, de la que precisamente tenemos que vencer el día 21. El día 21, entre otras cosas, ya no existirá la tercera vía. Es imposible. La gente que no vote las opciones claramente soberanistas estará votando por esta España. Esta España no cambiará nunca. Le tiene que gustar mucho a la gente que vote una opción que sigue defendiendo el statu quo actual, le tiene que gustar mucho esta España porque se quedará por muchos años así, cambiará poquísima cosa. Por lo tanto, se ha acabado el espejismo, la fantasía. Hay un periodista que acostumbra a hablar mucho de las fantasías de los otros y nunca mira las suyas propias. La fantasía de la tercera vía algún día alguien la tendrá que purgar un poco. Porque, ¿exactamente qué quiere decir la tercera vía, y con quién la piensa hacer? O es simplemente una tanda con una lista de espera inacabable, el día que... Pues aquella imagen representaba todavía esta fantasía.

¿Se arrepiente de haber aceptado la investidura?
No me arrepiento. Cuando el president Artur Mas me hizo la propuesta sabía lo que estaba asumiendo. No me puedo arrepentir de eso. Fue un gran honor, inesperado, al cual intento corresponder con mi actitud. No estaría aquí si no pensara que fue un gran honor o si me hubiera arrepentido. Me habría entregado, pactado, acatado y no sé qué. Claro que no me arrepiento.

El Estado español intenta crear un estado de miedo para que la gente vaya atemorizada a votar

¿Teme que la presión del Estado tenga efecto electoral?, esta represión no se limita a los miembros del Govern exiliados y en la prisión, hay también persecución del patrimonio personal, hay profesores declarando por delitos de odio...
No, evidentemente. Hay un estado de miedo. El Estado español intenta crear un estado de miedo para que la gente vaya atemorizada a votar. Para que la gente vea: ve con cuidado con lo que votas, no te equivoques porque habrá represalias, eso que has visto es sólo una prueba, no te equivoques porque si no seguiremos animando a las empresas que se vayan, afectará a vuestra economía... Este estado de miedo tiene cómplices en Catalunya. Y crear un estado de miedo a la buena gente es todo menos democrático. Claro que lo temo. ¿O es que puede no tener efectos que algunos no podamos hacer una campaña electoral con normalidad, que todavía haya gente en la prisión? A veces hablamos de una situación tan dramática y tan bestia... El interrogante casi sobra, ofende. ¿En estos 42 años desde la muerte de Franco, cuántas elecciones se han producido en que el gobierno legítimamente escogido está en la prisión y en el exilio y va a las elecciones? Ninguna. Por lo tanto, claro está que afectará, y que el Estado español intenta condicionar los votos. ¿O qué está haciendo TVE? ¿Qué está haciendo el grupo Planeta? Qué están haciendo otros grupos de comunicación a la hora de esparcir los infundios y las calumnias que se están ventilando. ¿Qué están haciendo? ¿Intentando contribuir a la democracia a través de la libertad de información? No. Están contribuyendo a la unidad de lo editorial que es un mecanismo más de combate contra una idea democrática que es la independencia de Catalunya.

Pero una cosa es que lo intenten, le pregunto si teme que lo consigan...
Aquí está la respuesta del pueblo de Catalunya, que no ha fallado nunca, y que está más que movilizado, sobre todo porque hay un muelle, que es el muelle de la dignidad. Hace tiempo le dije al señor Mariano Rajoy que no despreciara el poder del pueblo de Catalunya. Hace cuatro días en la portada del diario italiano La Repubblica en una entrevista al presidente Rajoy decía literalmente: "He salvado España". Volvemos a los salvapatrias, los salvadores de la patria. El día 21 la elección es entre los salvadores de la patria o los servidores del país, los que dicen el Estado soy yo o los que decimos el Estado sois vosotros, gente, y ayudadnos a hacer un estado mucho mejor y más democrático de lo que no podremos hacer nunca dentro de este Estado español.