El PSOE y Pedro Sánchez siguen en el ojo del huracán. El informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil colocó en el centro de la diana a Santos Cerdán, que el jueves se vio obligado a presentar su dimisión como secretario de Organización del partido, y llevó a Sánchez a dar una rueda de prensa para ofrecer explicaciones, en la que pidió perdón a la ciudadanía en hasta cinco ocasiones. La crisis reputacional y política del PSOE es histórica y la más grave a la que se ha enfrentado Sánchez. Pero el alud no se detiene. Si el informe coloca a Santos Cerdán en el centro de la trama del caso Koldo, junto con José Luis Ábalos y el propio Koldo García, ahora El Mundo revela que Santos Cerdán habría intentado comprar el silencio de Ábalos para que no levantara la alfombra. En concreto, ofreció en secreto a José Luis Ábalos que el PSOE le pagaría su defensa en el caso Koldo, así como un sueldo en una consultora de la órbita de la formación y el compromiso de rehabilitarlo políticamente en un futuro si no salía condenado por el caso. El pacto incluía que, a cambio, Ábalos tenía que entregar su acta de diputado y la no agresión al gobierno de Sánchez.

La oferta de Santos Cerdán

La oferta de Santos Cerdán a Ábalos llegó vía WhatsApp. El exministro le afirmó que si renunciaba al acta de diputado se quedaría sin defensa, motivo por el que se pasó al Grupo Mixto para "defender su honorabilidad". Según señala el medio, Cerdán insistió en varias conversaciones entre ambos, una de ellas se produjo en una reunión que tuvieron en la casa que Ábalos tenía alquilada en Rivas-Vaciamadrid, un encuentro del que también habría una grabación. El origen del caso Koldo fue el 21 de febrero de 2024, con la detención del exasesor personal de Ábalos. En aquel momento, el Gobierno le pidió al exministro, sin éxito, que renunciara a su acta de diputado para intentar el primer cortafuego del caso.

Ante la postura firme de Ábalos de defender su inocencia, Santos Cerdán le pidió que aceptara su petición a cambio de que "todos los gastos legales fueran a cargo del partido". En este sentido, le aseguró que no debía preocuparse por el coste económico que supondría una posible imputación en la causa, todo ello mientras el PSOE ya lo había suspendido cautelarmente de la militancia. La negativa de Ábalos llevó a Santos Cerdán a subir la apuesta y ofrecer también un sueldo por parte de una consultora vinculada con el PSOE. Así pues, le aseguraba estos ingresos a cambio de perder los que tenía como diputado del Congreso. Además, también le ofreció el compromiso del partido de que si salía libre del proceso judicial, sería rehabilitado políticamente.

La respuesta de Ábalos

Parece que a José Luis Ábalos no le convenció en absoluto la oferta, lo que provocó que se enfriara la relación entre los dos últimos hombres de confianza de Sánchez. Sin embargo, el intercambio de mensajes se mantuvo hasta que su relación se rompió del todo en agosto del año pasado, después de que el actual ministro de Transportes, Óscar Puente, encargara una auditoría que incriminaba a Ábalos en la adjudicación de los contratos de mascarillas durante la pandemia. "Si pensáis que con eso dejaré el escaño, lo lleváis claro", aseguró Ábalos. Por su parte, Cerdán intentó calmarlo diciendo que cómo podía pensar que era una acción para forzarlo a abandonar el escaño. Ábalos elevó el tono y afirmó "queréis forzar que me imputen", pero Cerdán contestó: "¿Cómo se te ocurre eso?"

Con todo, en el momento en el que Santos Cerdán ofrecía este pacto a Ábalos, todavía no era investigado, pero desde las filas socialistas ya lo daban por sentado, igual que lo hacían con Koldo García, según unas grabaciones de 2022 que ya están en manos de la UCO. En noviembre de 2023, Koldo le dijo a Ábalos que Cerdán llevaba "un año y cuatro meses" sin cogerle el teléfono porque, según apuntó, "desde entonces sabía que lo iban a imputar". Unas revelaciones que señalan que el PSOE podría conocer esta trama hace tres años, e igualmente incluyeron a Ábalos en las listas de 2023.