Este sábado, las portadas que hablan de los premios Princesa de Asturias pueden dividirse en dos bloques. Los diarios dinásticos de Madrid destacan una frase de Felipe VI: "Las soluciones a los problemas de España vendrán de la unidad, nunca de la división", uno de los tópicos habituales de los reales discursos que quieren decir aquello que los diarios le hagan decir, de manera que los lectores de cada uno saquen la conclusión que mejor les encaje. Los diarios del Trío de la Bencina lo llevan al título principal —El País lo publica por debajo de la primera página aunque la foto de portada sí es de la familia real española.
Emparejada con la línea del rey, todos los diarios publican una afirmación de la princesa Leonor donde deja claro que está al corriente de sus responsabilidades y deberes, etcétera. Es bonito que los diarios tengan esta fe en la magia de las palabras "lo que nos une", concepto de ingrato recuerdo para muchos ciudadanos, especialmente los que sufrieron los asaltos y agresiones policiales del 1 de octubre y la represión judicial posterior en nombre, justamente, de esa unidad que resuelve todos los problemas y que, de momento, no ha resuelto el principal. Para no poca gente, la frase del rey de España suena más a un aviso, a una amenaza con el dedo levantado o los puños cerrados, como las del 3 de octubre de 2017.
Quizás sea esta reminiscencia la que ha hecho que los diarios monárquicos de Barcelona dediquen la foto de portada a los premios sin llevarlo al tema principal. Sobre todo hay que remarcar que los títulos destacan otro discurso, el de la actriz norteamericana Meryl Streep, premio Princesa de Asturias de las Artes de este año. Se han fijado en la frase final, que dice así: "El don de la empatía es una cosa que todos compartimos. La empatía puede ser una forma radical de acercamiento y de diplomacia, igualmente útil en otros ámbitos. En este mundo nuestro cada vez más hostil y volátil, espero que podamos hacer nuestra otra regla que se enseña a todos los actores: lo importante es escuchar".
El kommentariat ha querido ver aquí una alusión al conflicto de Palestina. Ya puestos, ¿por qué no a España? Mientras Felipe VI hace una advertencia a pasar por el aro de la unidad, Mery Streep propone cambiar de actitud y estar pendientes de lo que viven, piensan y dicen los otros para conocer sus aspiraciones y así hacer camino para desencallar los enfrentamientos, los malentendidos, las hostilidades. Dirás que es también un tópico. De acuerdo. Pero cabe decir que no se ha intentado mucho como "solución a los problemas de España". Mira por donde, si no se distraen, Felipe VI y sus cortesanos habrán recibido una lección de una mujer que ha debido ponerse en la piel —de empatizar— de muchos personajes diferentes para llegar a ser, probablemente, la mejor actriz de la historia.
