Las portadas van de la broma al entusiasmo y a la rabieta. Todas salvo una se abren hoy con el cordial saludo entre el president de la Generalitat, Pere Aragonès, y el del Gobierno, Pedro Sánchez, en un acto de la patronal Foment en honor de Javier de Godó, el editor de La Vanguardia. Enhorabuena al homenajeado: lleva 34 años al timón del diario líder y del grupo de comunicación que ha construido a su alrededor. La única portada que no titula con el presidencial encuentro es la de El Punt Avui, diario donde trabajó el president exiliado Carles Puigdemont. Just saying. El Punt hace una broma con el título Vuelven los turistas sobre la foto donde se ve a Aragonès y Sánchez haciendo puños. Atribuir al diario la intención de calificar de turista a Sánchez —y derivadas— es quizá una interpretación excesiva y sin sentido. Ganas de encontrar roña en el cesto. Pedir peras al olmo. Un abuso. Obligar a otros a ver con los propios ojos. Cualquiera que se fije bien advierte que son dos informaciones separadas. Etcétera. Pero vista la portada de lejos en el quiosco o de reojo en la barra del bar... Si non è vero, è ben trovato. En cualquier caso, nadie tildará de injusta la apreciación de que a este diario no se le entusiasmado por los indultos, la vía pactada y la mesa de diálogo.
En el resto de diarios de Barcelona, entusiasmo y esperanza en varios grados. La Vanguardia habla de "etapa de entendimiento" y remacha con la información a una columna donde explica que algunos líderes regionales del PP son reticentes a la campaña contra los indultos y que incluso los ve bien el barón socialista Guillermo Fernández, presidente de la Junta de Extremadura. El Periódico habla de "distensión" con una fotaza de Aragonés y Sánchez haciendo puños —la mejor editada de todas—. Ara, más sobrio (suya es la primicia), explica el meollo del mensaje de Oriol Junqueras y la reacción positiva de La Moncloa, y deja las interpretaciones a tu imaginación y criterio, aunque se le escapa un "deshielo" en el título de la foto. Hablar de entendimiento, distensión o deshielo cuando todavía no ha pasado nada o poquito —un saludo de puños— es un poco, digamos, prematuro o demasiado rumboso, quizás fruto de un ambiente de entusiasmo. Que en este juego ya nos conocemos todos hace siglos. Pero a los diarios se les comen tanto las ganas que ya lo dan todo por hecho y descartan el precedente. Si tienes ganas de bailar, no necesitas mucha música, dice el dicho.
Los diarios de Madrid ponen mala cara
A El País no se lo ve muy feliz. Por cierto, en portada hace el juego contrario al de El Punt: el título principal está por el tema catalán y la foto por el retorno de los turistas —aquí no hay confusión posible ni asidero para deducir interpretaciones malévolas. El diario se hace un poco el chulito, como queriendo decir que Oriol Junqueras, con su carta, se ha "alejado" de la vía unilateral para ganar el indulto, como si el presidente de ERC hubiera cedido, renunciado, claudicado a unas condiciones que se le imponían a cambio de la medida de gracia. Si no quieren decir eso, poco se han esforzado darle otro sentido. Por otra parte, se confirma que "vía unilateral" queda marcado como eufemismo de preferencia para hablar del procés y del 1-O como cosas horribles y feas que nunca deberían haber pasado en una Democracia Plena™ —o Democracia Vibrante™, en expresión ahora de moda.
Al Trío de la Bencina, en cambio, el saludo entre presidentes les ha irritado en una variedad de grados. Lo ven como una traición de Sánchez. Porque Junqueras "exige" el referéndum a cambio de aceptar el indulto, según El Mundo. Porque "no ha renunciado a la independencia", dice ABC, donde aun no se han leído el informe de la comisión de libertades del Parlamento Europeo, que desautoriza un condicionante tal. Porque "abre la vía al referéndum pactado", en opinión de La Razón, que en el editorial y en el billete del director habla de "fracaso", "derrota", "entierro del 1-O" y otras enormidades. El cañoneo contra los indultos y la mesa de diálogo desde las portadas de estos tres diarios continúa, impasible el ademán (para los menores de 50, esto último es un versito del Cara al sol, el himno de la Falange, el partido único cuando la dictadura de Franco).