Las agresiones ultras empiezan a ser una constante. Ayer, no sólo los casales de Nou Barris y Horta sufrieron diferentes ataques, sino que también le tocó a Ciutat Vella.

El barrio barcelonés se ha levantado hoy lleno de pintadas de esvásticas amarillas y alguna otra en que pone "155", en alusión al artículo de la Constitución española que el gobierno de Mariano Rajoy aplicó a Catalunya para retirarle la autonomía.

Los casales populares de los distritos de Nou Barris y de Horta de Barcelona, por su lado, ya han condenado las agresiones ultras que han sufrido en los últimos días y han denunciado la constante presencia de la extrema derecha en los barrios. Además, han reivindicado la voluntad de seguir luchando por un "barrio libre de fascismo y discriminación".