El debate de la amnistía ha despertado la ira de la vieja guardia socialista y de los barones más españolistas del partido. A las críticas de Felipe González, Alfonso Guerra o Javier Lambán, se ha sumado Emiliano García-Page, dirigente que habitualmente levanta la voz contra las decisiones de Pedro Sánchez. Y la medida que reclama el president en el exilio, Carles Puigdemont, como condición para poder abordar la negociación de la investidura de Sánchez, enfurece al presidente de Castilla-La Mancha, que ha reconocido estar "muy preocupado" por esta posibilidad. Page ha querido destacar que su partido se presentó a las elecciones generales del pasado 23 de julio insistiendo en el hecho de que la amnistía "no tiene cabida" en la Constitución y le parece "enormemente grave" que "aquello que no cabía en la Constitución quepa de un día para otro". En esta línea, el jefe del ejecutivo castellanomanchego reclama que no haya "ambigüedad" en esta cuestión y que se expliquen aquellos que "quieran hacer un cambio de enfoque o de idea".

En unas declaraciones a los medios de comunicación durante una visita a la Feria de Albacete, el socialista ha apuntado de nuevo que "desde el presidente del Gobierno hasta todo el ejecutivo en pleno se han hartado de decir que la amnistía no cabía en la Constitución", recordando que era la "contestación que se le daba permanentemente a Esquerra Republicana". "La última cosa que he oído a Pedro Sánchez decir de la amnistía es que no cabía en la Constitución, todavía no he oído otra cosa y esperaré a oírlo para poder valorar", ha añadido, a la vez que ha anunciado que tiene intención de hacer un planteamiento concreto al respecto "en el momento correcto". Sobre este "momento", Emiliano García-Page ha indicado que "ahora es el momento de la investidura de Feijóo y hace falta verlo también con mentalidad práctica y no caer en la retórica en la cual nos quieren instalar algunos". El presidente de Castilla-La Mancha ha precisado que quiere analizar estas "cosas" con detalle y pronunciarse "con fundamento" cuando corresponda.

Page pide escuchar a los independentistas cuando primero reconozcan el "camino" constitucional

El dirigente socialista no niega que se tenga que hablar con las formaciones independentistas, pero considera que se les tiene que escuchar cuando "primero hayan reconocido el camino constitucional" aunque tengan el objetivo de cambiarla y que afiancen un "compromiso evidente de no volver a hacer" lo que pasó en el año 2017. En paralelo, ha criticado que es una "obviedad que se quiere pasar por alto" porque cree que si los independentistas quieren la amnistía para "volver a hacerlo, es miel sobre hojas".

Ante el eventual caso de que pueda haber una repetición electoral, García-Page sostiene que el PSOE mejoraría los resultados, aunque solo lo puede hacer "si no alimentara ninguna ambigüedad con respecto a la vocación constitucional ni sobre la igualdad" de los españoles. En relación con las declaraciones de José María Aznar animando a una "rebelión nacional" contra la amnistía, el presidente castellanomanchego ha dicho que no le sorprenden estas afirmaciones y le ha pedido dejar de lado el "lenguaje guerracivilista" que se está instalando en el debate público: "De los extremos no vendrán nunca las soluciones, hacen falta posiciones más ponderadas y moderadas".