Invitado por el Grupo de Amigos del País Vasco y las fuerzas de izquierda, el secretario general de Sortu, Arnaldo Otegi, ha viajado hoy a Bruselas para anunciar una "nueva política" y para pedir a Europa que se involucre en el proceso vasco. Lo ha hecho en el Parlamento Europeo, donde ha aprovechado para cargar contra el presidente español en funciones, Mariano Rajoy, dirigiéndose a él para advertirle que "instrumentalizar mi persona y el conflicto vasco para ocultar las deficiencias es una estrategia condenada al fracaso".

"Las estrategias de tinta de calamar que pretenden ocultar los graves problemas del Estado no funcionaron", ha querido dejar claro Otegi en una breve comparecencia ante los medios de comunicación durante el acto del décimo aniversario del Grupo de Amigos del País Vasco, en el que también han asistido eurodiputados catalanes como Ernest Maragall o Josep Maria Terricabras. Antes del debate, que llevaba por nombre "La situación del proceso de paz vasco", el líder abertzale se ha sumado a un minuto de silencio en memoria de las víctimas del terrorismo.

"Ni la situación económica, ni la crisis estructural, ni la situación de las naciones sin Estado son el camino del futuro", ha puesto de manifiesto, y ha recordado que "el Estado no se ha movido ni un milímetro", mientras que "la izquierda independentista ha hecho todo lo que estaba en sus manos". "Hay una actitud insaciable de quien nunca considerará suficiente nada de lo que hacemos", se ha lamentado, "pero no perderemos la sonrisa", ha asegurado.

El líder de Sortu ha hablado, pero no ha querido responder ninguna pregunta, y ha aprovechado para reclamar que "todos los presos políticos vascos salgan de la prisión y los refugiados vuelvan". Un diputado flamenco se ha dirigido a Otegi para comunicarle que le hace feliz ver como "el Estado español no ha conseguido hacerle caer en la prisión como quería".

La vicepresidenta del Gobierno español en funciones, Soraya Sáenz de Santamaría, no se ha podido privar de opinar sobre la presencia del dirigente de la izquierda abertzale en el Parlamento Europeo y ha asegurado que esta visita "ennegrece" Podemos e Izquierda Unida. Mientras Otegi ha dejado claro que "ellos continúan anclados en el pasado", Sáenz de Santamaría lo ha definido como "el pasado reciente más negro de la historia española".