Ni "reverendo padre", ni "madre superiora de la congregación" ni "el cura". Hoy ha sido el turno de admitir responsabilidades para la familia Pujol. Esta mañana Oleguer Pujol ha reconocido su "pecado": haber abierto una cuenta en Andorra para recibir la herencia de su abuelo, algo que según él mismo es "reprochable". En una entrevista en RAC1, el pequeño del clan Pujol ha reconocido su error al no declarar el dinero del abuelo Florenci, al mismo tiempo que ha defendido a ultranza a su familia y especialmente a su hermano Jordi.

Un ataque desde Madrid

Oleguer Pujol ha lamentado la mala situación en la que se encuentra su familia tras los escándalos de los últimos meses y ha dejado a entender que esta situación ha sido premeditada y orquestada por el Ejecutivo de Mariano Rajoy. 

"Hay un ataque desde Madrid con todas las estructuras del Estado para acabar con el nombre y el legado de mi padre", ha contado el pequeño de los Pujol, que asegura que todo está pensado para destruir la obra de gobierno del president Pujol. "Hay un interés especial en desacreditar e incluso desterrar a mi padre", ha sentenciado.

Siguiendo las comparativas y menciones religiosas a las que los Pujol hacen referencia a menudo, Oleguer Pujol ha comparado la situación de su padre con la del budismo tibetano en China. "Lo que aquí tienen contra mi padre es comparable a lo que en China tienen contra el Dalái Lama", explicaba en un paralelismo entre su padre y el líder espiritual del Tíbet.

Defiende a Jordi jr.

Oleguer ha extrapolado la presunta campaña de desprestigio a su padre a la situación de su hermano mayor, Jordi jr., que se encuentra en la cárcel. "Hay todo un mecanismo del Estado porque mi hermano Jordi vaya a la cárcel, no hay nada que hacer", se ha lamentado. Asegura que tiene ganas de verle, de hacerle una visita, pero ha contado que aún no ha podido porque espera que lo trasladen pronto a Catalunya.

Están sin blanca

El pequeño del clan Pujol ha asegurado que la situación del resto de sus hermanos tampoco es especialmente favorable. Ha contado que él ya ha renunciado a buscar trabajo porque su apellido le castiga: "La gente tiene miedo a la exposición de estar haciendo cosas con un Pujol", ha explicado emocionado. Oleguer lleva cinco años sin trabajar pero aun así no se considera el hermano más perjudicado por el escándalo. "Hay hermanos como Oriol, Pere o Marta que han sufrido mucho", ha añadido.

Oleguer Pujol ha identificado la situación de los hermanos como consecuencia de la permisividad del president Pujol. "Mi padre tenía un dilema moral desde que murió su padre y aceptó que sus hijos tuvieran dinero fuera", ha contado sobre el patriarca, del que ha asegurado que está "jodido" tras los múltiples escándalos que rodean a sus hijos. "Cuando lo atacan a él se siente fuerte, pero no cuando atacan a la familia", ha matizado.