Esta Nochevieja unas 2.500 personas se han concentrado en los alrededores de la prisión de Lledoners con el fin de hacer llegar su apoyo a los presos políticos que están lejos de sus familias, siguiendo la consigna de Omplim Lledoners. Pese a la temperatura, que llegaba a los 0 grados, los activistas por la independencia han decidido hacerse oír cerca del centro penitenciario para dejar claro a los presos que no están solos

La gente ha encendido hogueras que han ayudado a superar el fuerte frío. Durante la noche han sonado algunas canciones que habían sido escogidas por los propios presos y exiliados. También ha habido fuegos artificiales que los asistentes querían que se oyeran dentro del recinto. Algún preso ha hecho ondear un trapo amarillo por la ventana y ha sido muy aplaudido por los asistentes.

Muchos asistentes han compartido la cena en torno a mesillas de camping o de las hogueras. Las doce campanadas se han dedicado a los presos y a los exiliados, y cada nombre ha sido coreado con gritos de "Libertad".

Por su parte, unas 200 personas se han concentrado en la prisión de Mas d'Enric, donde está encarcelada la presidenta del Parlament Carme Forcadell, y unos centenares más en la prisión de Puig de les Basses, donde está encarcelada Dolors Bassa.