El histórico líder sindicalista de UGT, Nicolás Redondo Urbieta, ha muerto este miércoles a los 95 años, según lo ha comunicado el mismo sindicato a través de un comunicado. "Nuestra más sincera gratitud por su trabajo e inmensa dedicación al sindicalismo y a las trabajadoras y trabajadores de nuestro país. Su memoria nos impulsa para ser continuadores de la lucha y el legado", afirma la UGT en su despido.

No solo el sindicato ha mostrado sus condolencias públicamente. Varios dirigentes políticos se han despedido de Redondo a través de las redes sociales. El mismo PSOE ha lamentado su muerte y ha descrito Redondo como un socialista "que dedicó toda su vida a la lucha por|para los derechos de los trabajadores y la ciudadanía". En la misma línea se ha expresado el candidato socialista a la presidencia de la Comunidad de Madrid, Juan Lobato, que ha señalado a Nicolás Redondo como un "referente de la defensa de los derechos y la dignidad de los trabajadores" del país. También Javier Lambán, presidente socialista de Aragón, ha afirmado que era un "impulsor destacado de la transición y la democracia".

Nicolás Redondo, el histórico sindicalista

Nicolás Redondo Urbieta nació en Barakaldo (Vizcaya) el año 1927 y se convirtió en una figura clave del sindicalismo español del siglo pasado. Su padre, Nicolás Redondo Blanco, trabajador de los Altos Hornos, ya era militante del PSOE y de UGT en 1915, y después de la Guerra Civil lo condenaron a muerte, pero le conmutaron la pena por 30 años de prisión, de los cuales hizo seis en el Puerto de Santa Maria (Cádiz). Cuando tenía 10 años, en plena Guerra Civil, Redondo fue uno de los niños vascos evacuados en el barco la Habana que lo llevó a Burdeos (Francia). El año 1940, su familia lo reclamó y así volvió al País Vasco.

Unos años después de volver a España, en 1945, Redondo empezó a trabajar como obrero metalúrgico, así acabó afiliándose al PSOE y la UGT. Así arrancó una biografía sindical de larguísimo recorrido, que consiguió la primera línea pública en 1976. Fue detenido y procesado por el régimen de Francisco Franco en numerosas ocasiones (hasta seis veces) a causa de actividades políticas y sindicales.

El 18 de abril de 1976 fue elegido secretario general de la UGT en el 30.º Congreso de la central sindical socialista. Dos años antes había renunciado a liderar al PSOE en el congreso de Suresnes. Fue elegido diputado del PSOE por Vizcaya el 1977, 1979, 1982 y 1986. En 1987 renunció a su escaño después de votar en contra de los presupuestos generales del Estado (PGE) para 1988. El año 1994 se apartó de la dirección de la UGT y dejó paso a Cándido Méndez como secretario general, retirándose así de toda actividad política y sindical.