El diario francés Le Monde ha publicado un artículo sobre la abadía del Valle de los Caídos en el que muestra su estupefacción por el hecho de que perdure una estructura como esta tantos años después de la muerte del dictador. La tildan de "siniestra basílica" y recuerdan que fue construida con el trabajo esclavo de presos y que se enterraron allí a muchos republicanos contra la voluntad de sus familias. El reportaje se ha realizado porque el abad de la tumba de Francisco Franco se negó a comparecer ante el Senado el pasado día 12, una comparecencia exigida por los grupos de la oposición para criticarle que se negara a permitir la exhumación de los cuerpos de algunos presos republicanos.

El poder de la Iglesia

El periódico francés muestra su sorpresa por el hecho de que el abad de los benedictinos, Santiago Cantera, rinda homenaje a Franco y a José Antonio cada 20 de noviembre con una misa, y que recientemente oficiara un acto en honor a la hija del dictador. Pero lo que le parece más intolerable a la corresponsal Sandrine Morel es que Cantera se oponga a las disposiciones del juez que ordena el desenterramiento de las víctimas reclamadas por sus familiares, todo eso en un monumento de titularidad pública y financiado por Patrimonio Nacional. El artículo del diario Le Monde no recoge que el pasado viernes Santiago Carrera decidió retirar el recurso que había interpuesto, ante de las presiones de la Conferencia Episcopal.