Ante los ataques que considera que ha recibido, Manuel Valls ha replicado dando la razón a sus adversarios. "Pues sí, soy el candidato de las élites", ha asegurado el exprimer ministro francés este lunes durante la presentación de su nuevo libro Barcelona, vuelvo a casa. "El candidato de todas las élites: las económicas, las políticas, las culturales, las sociales. Las élites de hoy y las de mañana", ha insistido el alcaldable por Barcelona.

El político francocatalán ha presentado este lunes su libro en el Auditori de Barcelona, en un debate con el escritor peruano Mario Vargas Llosa, y con algunos de los principales dirigentes de Ciudadanos en las butacas. También han asistido sus intelectuales de referencia, como el catedrático de derecho constitucional Francesc de Carreras, el escritor Ramón de España o el historiador Joaquim Coll. Desde allí ha defendido que "una ciudad como Barcelona necesita élites", y por eso ha cargado contra el "discurso populista" que lo acusa de ser el "candidato de las élites".

El exprimer ministro francés ha hablado de su infancia en Barcelona, pero también de su proyecto para la ciudad, y lo ha hecho apelando al catalanismo y también al maragallismo "sin nostalgias". En este sentido, ha recordado que el catalanismo, durante el siglo XIX, fue un "movimiento político e intelectual para modernizar Catalunya y España". El problema, ha sentenciado, es cuando el "patriotismo" se ha convertido en "nacionalismo".

"Barcelona merece tanto, que no la podemos dejar ni en manos del populismo ni en manos del separatismo", ha alertado Manuel Valls, que ha añadido: "No sólo sería un desastre económico, sino que supondría volver a una historia que no ha conocido nunca Barcelona". Según él, es "una forma de radicalismo, de mirada estrecha y también populista, que no tiene nada que ver con la Barcelona del 92, ni con Maragall y el maragallismo".

Durante la conversación, Valls también se ha referido a la figura de Felipe VI, después de la reprobación por parte del Parlamento. Lo ha hecho para asegurar que lo importante no es si es monarquía o república, sino el contenido. "Venezuela también es una república", ha señalado. En esta línea, ha valorado la "unidad nacional" que se ha dado en Francia con los atentados, y ha lamentado que no se haya dado aquí, con el abucheo al Rey.

Gran parte de su discurso ha apuntado contra el populismo, a un grupo en el que también ha situado el independentismo. Ha subrayado algunos de los episodios consecuencia del populismo de este fin de semana, como la victoria del ultra Jair Bolsonaro en el Brasil o el ataque de la sinagoga de Pittsburgh, en Estados Unidos.

Mario Vargas Llosa ha aplaudido la oposición "radical pero nada pasional" de Valls al independentismo. Como ya ha hecho en anteriores ocasiones, ha evocado con nostalgia la Barcelona de los años 70, al final de la dictadura, donde dice que los intelectuales venían para sentirse europeos. "El independentismo ha conseguido apagar toda la luz que hizo de Barcelona un polo de atracción", ha espetado el Nobel de Literatura.