Este año el Monasterio de Montserrat celebra el milenario de su fundación, conmemorando los mil años desde que el abad Oliba, también obispo de Vic, estableció el monasterio benedictino en el corazón de esta montaña catalana. La efeméride se celebra con un amplio programa de actos religiosos, culturales y populares entre los cuales hay una visita del rey Felipe VI y la reina Letizia. Los monarcas irán a Montserrat el 23 de junio y no será la primera vez que lo hacen, ya que en el 2011 ya fueron, pero en calidad de Príncipes y, Felipe VI también había estado en abril de 1990 como príncipe de Asturias y Girona. La visita no ha gustado demasiado a muchas entidades catalanas, como es el caso del Assemblea Nacional Catalana, que ya ha adelantado que se manifestará contra la presencia de los monarcas, o la Lliga Espiritual de la Mare de Déu de Montserrat.

Esta entidad, creada por un grupo de jóvenes cristianos atados a la Unió Catalanista el año 1899, con el apoyo y el amparo del Dr. Josep Torras i Bages, pocos meses antes de ser nombrado obispo de Vic aquel mismo año, ha hecho público un manifiesto donde asegura que muestra "de manera clara y pacífica su rechazo a la visita de Felipe VI a Montserrat".

La entidad, que recuerda que es muy "consciente del marco legal e institucional en que se encuentra nuestra nación", apunta que no quiere entrar a valorar "los motivos ni las circunstancias de la visita". Ahora bien, advierten que eso no les priva de, "como catalanes", "querer mostrar nuestro rechazo a la presencia de Felipe VI en nuestra montaña sagrada".

Recuerdo al discurso del 3 de octubre de 2017

En el manifiesto hecho público, recuerdan el discurso televisado institucional del 3 de octubre de 2017 del Rey para abordar la situación en Catalunya después del referéndum del 1 de octubre. Aquel día, el monarca no condenó la violencia policial del 1-O ni hizo ningún llamamiento al diálogo, acusó a las autoridades catalanas de actuar con "deslealtad inadmisible" hacia el Estado, afirmó que el objetivo de estas autoridades era romper la unidad de España y dijo que el Estado tenía que asegurar el orden constitucional y el funcionamiento normal de las instituciones. Un discurso partidista y beligerante que la Liga Espiritual de la Virgen de Montserrat no olvida.

La entidad habla de "discurso abominable" en el cual "sin ninguna necesidad ni obligación institucional de hacerlo, justificó la represión de los cuerpos de seguridad españoles contra el pueblo catalán que, democráticamente, solo quería ejercer el derecho universal de votar el Primero de Octubre". Un derecho, recuerdan, "amparado por la Doctrina Social de la Iglesia".