El expresident de la Generalitat Jordi Pujol recibirá previsiblemente el alta hospitalaria este viernes, después de una "evolución favorable" de la neumonía que lo tiene ingresado desde el domingo en la Clínica Sagrada Familia de Barcelona. Así lo ha informado su médico personal, el doctor Jaume Padrós, en una entrevista este jueves en la Cadena SER. El doctor ha precisado que "si no hay ningún contratiempo", Pujol mañana ya estará en casa y continuará el tratamiento de recuperación en su domicilio, haciendo "la convalecencia adecuada". Aun así, Padrós ha apelado a la "prudencia", porque se trata de un hombre mayor, de 95 años, con patologías de base.

Preguntado sobre el juicio que empieza el lunes en la Audiencia Nacional, el doctor personal del expresident Pujol ha señalado que el informe forense concluyó que no estaba en condiciones de desplazarse ni de declarar. Sobre esto, ha insistido en que es un "paciente vulnerable" y que "no está en condiciones de hacer ninguna declaración, ni de someterse a ningún interrogatorio, sea de la propia defensa, la fiscalía o el juez". Padrós ha explicado que ahora ya "no puede tener una conversación normal", ni hablar de cosas "que necesitan razonar, recursos dialécticos, situarse en el tiempo, volver atrás, argumentar, tener capacidad dialéctica".

"No puedo entender desde el punto de vista médico ni humano, y más con circunstancias sobrevenidas de una neumonía, que tenga que comparecer", ha valorado Padrós, para añadir que "el respeto a la dignidad de las personas está por encima de cualquier otra coincidencia".

La Audiencia Nacional ha citado al expresident Pujol a comparecer por videoconferencia el próximo lunes, antes de comenzar el juicio contra él y sus hijos por diversos delitos económicos. El tribunal quiere "examinar el estado de salud" después de que su defensa pidiera un informe médico forense y aportara uno propio para intentar que Pujol no tenga que viajar a Madrid en diversas ocasiones para seguir el juicio debido a problemas físicos. Su hijo Oriol Pujol, exdirigente de Convergència, ha revelado recientemente que su padre está lo suficientemente bien para un hombre de su edad y que no se le debe inhabilitar, pero que tiene el cuerpo "castigado, débil y frágil, arrastra dolor, no le aguanta". Y reveló que tenía marcadores de alzhéimer, como un problema en el habla o que a menudo le cuesta recordar o no ubica bien hechos y personas.

La Fiscalía pide nueve años de prisión para el nonagenario expresidente catalán

La Fiscalía acusa al expresident de la Generalitat  y a su familia de crear “una red de clientelismo”, y pide 9 años de prisión para Jordi Pujol por los delitos de asociación ilícita (5 años), del cual le hace director, y de blanqueo de capitales (4 años). La pena más alta pedida es para el primogénito, Jordi Pujol Ferrusola: 29 años de prisión, porque además de los dos delitos del padre, también se le imputan los delitos contra Hacienda y falsificación documental, como también a su exmujer Mercè Gironès (17 años de prisión), y a Josep (14 años). Para el resto de hijos —Pere, Oleguer, Oriol, Mireia y Marta el fiscal pide 8 años de prisión por los mismos delitos imputados a su padre.

Las defensas piden su absolución porque no se ha concretado ninguna irregularidad. En concreto, se sostiene que el dinero que tenían en Andorra proviene de la herencia del abuelo Florenci, ascendía a 140 millones de pesetas en dólares, y que estos "no guardan ninguna relación con la alta función pública que Jordi Pujol i Soley ejerció en la Generalitat de Catalunya" desde su primer nombramiento como presidente en 1980 hasta su cese en 2003. El juicio comienza el lunes 24 de noviembre.