Con la consulta interna de Junts ya en marcha, después de batallar con los problemas informáticos, continúan las valoraciones de los partidarios y contrarios a abandonar el Govern. El conseller de Economia i Hisenda, Jaume Giró, ha explicado a las puertas del Parlament que ya había votado en la consulta y que lo había hecho a favor de seguir formando parte del Govern. Ha insistido en aconsejar cintura para negociar con los socios, ha replicado que "tragarse sapos" es habitual en política y en la vida en general, y ha advertido que el "motor para avanzar siempre, aquí y en cualquier lugar del mundo, es el gobierno". En conclusió, según su opinión, es que el camino de la independencia formando parte del Govern es muy difícil, pero que saliedo del Govern "no es difícil, es imposible"

a aquellos que apuestan por salir del Govern por un cálculo electoral, recordando lo que representó para el PSC renunciar a formar parte del ejecutivo de Jordi Pujol en 1980.

El conseller ha explicado que después de las primeras elecciones en el Parlament, Jordi Pujol ofreció al PSC de Joan Reventós, que había conseguido 33 escaños, formar parte del gobierno en un ejecutivo de coalición para un momento especialmente delicado económica y políticamente para el país. "En aquel momento el PSC rechazó formar parte del Govern de la Generalitat, convencido de que Convergència no aguantaría, que Pujol quedaría muy debilitado y que a las próximas elecciones el PSC arrasaría," ha explicado Giró, que ha añadido que "el PSC estuvo 23 años a la oposición y hubo muchas mayorías de Convergència".

Giró ha explicado que ha votado en la consulta abierta a la militancia y que lo ha hecho a favor que Junts siga formando parte del Govern, porque considera que es lo mejor para el partido en la "encrucijada decisiva que vive en este momento Junts". Se ha declarado convencido que el espacio político que representan es de gobierno, para estar en el ejecutivo y a las instituciones, y que hay un sentimiento generalizado entre los afiliados que Junts tiene que continuar en el Govern, a pesar de desconfianzas y agravios.

Comer sapos

En este punto ha replicado también a las voces que reprochan que Junts se ha tenido que tragar sapos dentro del Govern. "Qué partido político, y qué espacio político no se come sapos?. Siempre nos hemos comido sapos. Nuestro espacio político se los ha comido de padre y muy señor mío", ha asegurado, argumentando que Artur Mas estuvo dos legislaturas en la oposición habiendo ganado las elecciones y que fue de 4 en la candidatura de Junts pel Sí.

La respuesta ante esta situación tiene que ser, según ha añadido, "negociar lo mejor posible, negociar con cintura, avanzar para hacer a un gobierno fuerte, cohesionado, un gobierno que sea de cooperación". "Aquí no nos jugamos Junts o ERC o ERC o Junts, nos jugamos el bienestar de las personas en un momento muy complicado", ha remachado.

En relación a la opción para el diálogo que planteó el presidente, Pere Aragonès, el miércoles, durante la sesión de control al Govern, ha asegurado que "en una negociación franca, abierta, respetuosa, transparente se puede adelantar en este gobierno de coalición". Para Giró, abandonar el Govern abre un escenario en que no ve ninguna ventaja. mientras que los "inconvenientes son de todo tipo para el conjunto del país, para el independentismo."

Por lo que respecta al futuro del partido, ha asegurado que no ve ningún riesgo de escisión sea cuál sea el resultado de la consulta, todo el mundo lo aceptará. "Yo continuaré como un militante de base y como uno más de base, y aceptaré el resultado", ha asegurado.