El hombre que sufrió una parada cardiaca el 1-O en un colegio electoral del barrio de la Mariola de Lleida y que denunció las lesiones, Enric Sirvent, ha reconocido este miércoles en el juzgado de instrucción de Lleida a un agente del Cuerpo Nacional de Policía que presuntamente le dio una patada y a otro que ayudó al agresor en los vídeos que se le han mostrado, según ha explicado el abogado Jaume Alonso-Cuevillas, que se ha personado como acusación particular.

"Ha reconocido concretamente al que le pegó la patada y al que ayudó al que le pegó", ha afirmado al salir del juzgado Alonso-Cuevillas, que se ha personado como codefensor en el caso en el que, representando a Advocacia per la Democràcia, lleva el caso la abogada Anna Llauradó. Según sus datos, están identificados tres agentes y a medida que avance la investigación, se concretará si hay mandos y otros policías con responsabilidad en los hechos.

Lesiones y omisión de socorro

Preguntado sobre los delitos que constituirán la acusación, Cuevillas ha señalado que el proceso está en sus inicios y que en su momento los hechos podrían calificarse de delito de lesiones "de forma clarísima con secuelas graves con el agravante de odio". Por su parte, la abogada Anna Llauradó ha añadido la omisión de socorro, argumentando que en las imágenes se ve "esta omisión por parte de todos los agentes actuantes porque dada la gravedad de los hechos, lo que prima es la asistencia a un herido".

Sobre la declaración de la víctima, Cuevillas ha afirmado que los hechos "son contundentes, por lo que ahora se tendrán que pedir declaraciones testificales y de los imputados". "La prueba documental videográfica y fotográfica que abre las actuaciones es contundente, se demuestra la brutalidad de las lesiones que sufrió el señor Sirvent, como rotura de costillas, contusiones y hematomas diversos, alguna lesión que le ha quedado, un quiste hematómico que puede comportar lesiones", ha dicho.

Sirvent ha llegado a las puertas de los juzgados cerca de las 10.00 horas y ha sido recibido con aplausos por unas cincuenta personas, que de esta manera han querido mostrarle su apoyo y que le han esperado hasta que ha finalizado su declaración.

Ante los asistentes, la mayoría miembros Comités de Defensa de la República (CDR), Cuevillas ha explicado que mientras declaraba Enric Sirvent había recibido una llamada telefónica del expresident de la Generalitat, Carles Puigdemont, en la que ha expresado su apoyo a la presunta víctima, y otra en el mismo sentido del exconseller de Salud Toni Comín.