El vicepresidente del Gobierno, Pere Aragonès, y la consellera de Agricultura, Teresa Jordà, han defendido desde Vinebre, en la Ribera d'Ebre, que más allá de las medidas de urgencia que hacen falta para gestionar el "post incendio" y reparar los daños del fuego, hace falta una estrategia a largo plazo para reforzar la ganadería y la agricultura como actividades de gestión del entorno.

"Es con la gestión que se reaviva el territorio y hay que entender la agricultura y la ganadería. no sólo como una actividad en sí, si no como gestores del territorio", ha apuntado a Aragonès. "Es el primer incendio que hace que la opinión pública es plantee la importancia de la gestión del sector primario y eso tiene que ser una oportunidad", ha añadido Jordano.

El vicepresidente Pere Aragonès y la consellera Teresa Jordà han sobrevolado la zona del incendio de la Ribera d'Ebre, el Segrià y las Garrigues y han hecho también una visita sobre el terreno donde han podido hablar con el ganadero más afectado por el fuego, Pere Jornet, que perdió todo el ganado las primeras horas del fuego en la Torre de l'Espanyol.

Más ayudas y menos burocracia

Más de 200 campesinos, ganaderos y otros afectados por el incendio se han reunido con el vicepresidente y la consellera en Flix. Los agricultores tienen claro que el plan de choque pasa por una línea de ayudas directas, urgentes y a fondo perdido y una agilización de la burocracia.

Aragonès y Jordà se han comprometido a crear una oficina técnica sobre el terreno que centralice las peticiones. "Fuera burocracia y seguramente querrá decir que tenemos que enviar peritos ya, porque si podemos hacerlo en dos semanas que no sean tres y tenemos que ser capaces de personalizar cada caso", ha asegurado a la consellera. "Las líneas de apoyo que pueda haber, tienen que ser con el menor papeleo posible", ha añadido Aragonés.