El exdiputado de Junts pel Sí Germà Bel ha ido a declarar este lunes delante de la policía como investigado por un presunto delito de odio y discriminación. La denuncia, impuesta por la Fiscalía, se basa en un informe policial centrado en un tuit publicado por él el día 3 de octubre, coincidiendo con el paro de país, y reforzado con tres tuits anteriores más.

Bel denuncia "falsedades constatables" en el documento, que le acusa de "generar un estado de opinión contrario" a la policía con sus tuits, y que destaca sus condiciones de profesor y parlamentario. En los tuits, el entonces diputado criticaba la violencia de los cuerpos policiales españoles durante el 1 de octubre y las jornadas posteriores.

Según él mismo ha explicado en la red social, los tuits eran críticos con la "política policial del PP, con apoyo de Cs y PSOE, y la voluntad del Gobierno central de infundir miedo indiscriminado en Catalunya".

Bel recuerda que, cuando mandó esos tuits, era diputado al Parlament de Catalunya, lo que comporta el derecho a la inmunidad parlamentaria. La comunicación de la citación se le entregó el lunes pasado por una denuncia de la fiscal jefe de Barcelona, Ana María Magaldi, con fecha de 11 de diciembre de 2017.

El exdiputado ha animado a los miembros del Parlament a "ser siempre dignos de los ciudadanos que representan" y "combatir los abusos de los poderes públicos sobre sus representados". También ha dejado un significativo mensaje para los diputados del Congreso, del que formó parte: "La democracia está enferma cuando se usan los mecanismos del Estado para intimidar y reprimir a la oposición".