El actual secretario general de Acción Exterior de la Junta de Andalucía, Enric Millo, se deja querer cuando le preguntan si será uno de los nuevos consejeros del gobierno popular de Juanma Moreno.

El presidente ha revalidado su cargo con una mayoría absoluta que aparta a Ciudadanos de la vicepresidencia y le da más margen para repartir sillas. ¿Una de ellas, para Millo? "Estoy muy contento ahora mismo del trabajo que tengo aquí. Nadie me ha pedido que vuelva a Catalunya, tampoco Alberto Núñez Feijóo," ha declarado en RTVE Catalunya.

"Moreno me tiene buena consideración"

Así pues, la segunda pregunta era evidente y Gemma Nierga le ha preguntado si eso quería decir que sería nuevo consejero andaluz: "Sólo aspiro a servir, mi obsesión es ser útil allí donde estoy. Estoy muy contento de trabajar con Juanma Moreno, es una persona excelente y me consta que me tiene buena consideración y tengo una buena relación personal con él desde el 2006", ha concluido entre sonrisas y sin negar la pregunta.

"Era difícil de imaginar"

Los populares están pletóricos. La mayoría absoluta en San Telmo ha hecho historia. En el 2008, el PSOE también la consiguió pero con 56 diputados, dos menos que los de ahora con el PP de Juanma Moreno, 58. "Se olía en el ambiente, todo era muy positivo y favorable, pero era difícil imaginar que se pudiera superar la mayoría absoluta que está en 55. Es un resultado realmente histórico. Se está produciendo el inicio de un cambio, de una nueva etapa un nuevo ciclo", concluye Millo que argumenta la mayoría por el "voto útil de muchos" delante de Vox que ha pinchado en sus aspiraciones y Ciudadanos, los cuales se han borrado del mapa.

"Con Puigdemont tenía mucha relación"

En paralelo, Millo ha vuelto a tirar de hemeroteca para recordar, una vez más, que él tenía relación en un pasado con el president Carles Puigdemont: "Con él tenía una relación muy cordial, habíamos negociado presupuestos del Ayuntamiento de Girona juntos y toda mi etapa como Delegado del Gobierno, hubieron conversaciones y diálogo siempre. También con Oriol Junqueras, Jordi Turull y Josep Rull. Teníamos una relación personal y cordial pero todos sufrimos la situación, yo especialmente. Y cuando se rompió la legalidad, yo tenía que restablecer la orden constitucional. Efectivamente, la relación personal dejó de tener vida, no hemos tenido nunca más la ocasión de vernos".

Sobre un posible reencuentro con el president Puigdemont, matiza: "Uno está en Waterloo y el otro en Sevilla pero yo estoy aquí porque quiero y no tengo que rendir cuentas ante la justicia española. Estoy muy a gusto. ¿Reencuentros? La vida es muy larga, ya veremos. Ahora mismo estamos muy distanciados y yo muy a gusto en Andalucía".