Vuelco electoral. Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) ganaría las elecciones al Parlament por primera vez y con comodidad y podría escoger entre JxCat y el PSC para formar Govern, según los resultados de una encuesta del Institut Feedback para ElNacional.cat sobre el escenario político catalán. A la vez, se ampliaría con creces la mayoría actual del bloque independentista (ERC, JxCat y la CUP) y por primera vez superaría el 50% de los votos.

Si las elecciones se celebraran ahora, los republicanos alcanzarían la primera posición con 41-42 escaños y la segunda se la disputarían JxCat, con 28 y el PSC, con 26-28. La CUP obtendría 8 diputados y En Comú Podem, 7. Ciudadanos, que fue la primera fuerza en escaños a las elecciones del 21-D del 2017 se hundiría, con 12-13. Subiría el PP, con 6 y Vox irrumpiría en la Cámara catalana con 5. 

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El sondeo se basa en una muestra de 800 encuestas telefónicas realizadas entre el 29 de junio y el 2 de julio y contempla un margen de error del 3,54%.

La encuesta recoge una previsión de indecisos, del 50,5%. La razón no es otra que la incertidumbre extrema que planea sobre el calendario electoral -las elecciones se podrían convocar como muy pronto en otoño, cuando está previsto que el Tribunal Supremo inhabilite por desobediencia al presidente de la Generalitat Quim Torra-, y el proceso de reconfiguración del espacio político de JxCat, que lidera el presidente en el exilio Carles Puigdemont, que se definirá este mes de julio.

Doble 'sorpasso' de Esquerra Republicana

ERC subiría de 9 a 10 diputados, de los 32 que obtuvo el 21-D, cuando fue tercera fuerza, a 41-42, su mejor registro en unas elecciones al Parlament desde 1980. La formación que lideran Oriol Junqueras y Pere Aragonès materializaría un doble sorpasso: desplazaría a Ciudadanos como primera fuerza en escaños y se impondría al espacio puigdemontista -hoy por hoy, JxCat- en la larga batalla por la hegemonía del independentismo.

En porcentaje de voto, los republicanos subirían 6 puntos sobre los anteriores comicios, de un 21,38% a un 27,38%. Por recuerdo de voto en las anteriores elecciones, ERC obtiene sus apoyos electorales entre los electores fieles, los que volverán a votarlos (63,5%); un 13,5% que no votó, un 10,1% que lo hizo por JxCat y un 9,4% que escogió la papeleta de la CUP.

Por el contrario, JxCat sufriría un importante retroceso: pasaría de 34 a 28 escaños (6 menos), quedaría como tercera fuerza en porcentaje de voto detrás del PSC, con un 17,84% y perdería su ventaja actual sobre ERC -de 2 escaños- de manera abrumadora: ahora quedaría a 13-14 por detrás de los republicanos. Por recuerdo de voto, el electorado de JxCat se muestra menos fiel que el de ERC, con un 48,5%.

El president Puigdemont, exiliado en Bélgica, si, como se espera vuelve a ser candidato, perdería así por primera vez las elecciones en Catalunya en su pulso con el republicano Junqueras, encarcelado en Lledoners, a quien superó en las elecciones al Parlament del 2017 y las europeas del 2019. 

El PSC, segunda fuerza en votos

La tercera formación del nuevo Parlament en número de escaños sería el PSC de Miquel Iceta, que pasaría de 17 a 26-28 como principal beneficiario del derrumbe de Ciudadanos. Si se atiende al porcentaje de votos, los socialistas serían de hecho la segunda fuerza en las elecciones, con un 19,73% -5,87 puntos más que en los anteriores comicios-. E incluso podrían empatar con JxCat en número de diputados en el mejor escenario.

Por la franja alta de la previsión, los socialistas son la candidatura que más asientos ganaría en el nuevo Parlament en total -11 más-. La fidelidad de voto al PSC es del 64,9% y un 20,7% de los electores que ahora optarían por los socialistas, según el sondeo, votaron a Cs en los anteriores comicios.

Batacazo monumental de Ciudadanos

La gran perdedora de los comicios sería Ciutadans. Los naranjas, que Inés Arrimadas situó el 21-D como primera fuerza, con 37 escaños, si bien muy lejos de los 68 necesarios para obtener la presidencia de la Generalitat, sufrirían ahora un batacazo monumental con Lorena Roldán: 12-13 escaños.

El partido fundado por Albert Rivera, pal de paller del unionismo en Catalunya en las elecciones celebradas en el 2017 con la autonomía intervenida después de la declaración de independencia, perdería ahora casi dos terceras partes de su presencia en el hemiciclo del parque de la Ciutadella, con 23 o 24 escaños menos. Solo el 16,1% de los electores que votaron a Cs en el 2017 lo volverían a hacer ahora. Del derrumbe de los naranjas se benefician el PSC, Vox y el PP.

La CUP dobla pero no es decisiva

La CUP sería cuarta fuerza, doblando sus efectivos en el Parlament: de los 4 escaños actuales a 8. Los anticapitalistas, liderados esta legislatura por Carles Riera, recuperarían así el 80% de la representación que alcanzaron en las elecciones del 2015, su máximo histórico de 10 diputados. No obstante, los cuperos perderían en buena parte su papel determinante para configurar mayorías, dado que ERC sumaría tanto con JxCat como con el PSC.

Los cuperos superarían en puestos en la nueva Cámara a los comunes, liderados por Jéssica Albiach, que bajarían de 8 a 7 escaños. No ostante, los comunes podrían ser necesarios para un pacto de izquierdas encabezado por ERC y con el PSC como socio principal.

Sube el PP e irrumpe Vox

El PP de Alejandro Fernández y los ultras de Vox, que obtendrían por primera vez representación en el Parlament de Catalunya, se benefician del desastre de Cs, aunque sus resultados son muy modestos y en ningún caso permiten articular una mayoría unionista con lo que queda de Ciudadanos y, eventualmente, el PSC.

El PP subiría de 4 a 6 diputados, un incremento muy modesto pero que rompe la tendencia a la baja por primera vez en las tres últimas elecciones. El crecimiento de los populares se ve frenado por Vox, que irrumpe en el Parlament con 5 diputados. Un 39,5% de sus electores optó por el PP en el 2017 y un 5,9 por Cs.

Finalmente, el Partido Nacionalista de Catalunya (PNC), la nueva formación articulada por la ex-coordinadora general del PDeCat Marta Pascal no obtendría representación. El sondeo le otorga un 0,78% de los votos y cero escaños. Otro 0,77% de los electores optarían por otras fuerzas, sin conseguir tampoco ningún escaño, y un 0,43% votarían en blanco.

El independentismo supera el 50% de los votos

El resultado de la encuesta de Feedback pone de manifiesto que la suma de votos a los partidos independentistas -ERC (27,38%), JxCat (17,84%) y la CUP (6,22%) - superaría por primera vez con claridad el 50% de los sufragios en unas elecciones, con un 51,44% del total. Si se añade el 0,78% del PNC -partido que defiende la independencia aunque rechaza la vía unilateral- se alcanza el 52,22%.

La suma de escaños de los partidos independentistas en el nuevo Parlament también sería el máximo que han alcanzado hasta ahora, con 77-78 representantes. En las elecciones del 2017 (JxCat + ERC + CUP) fueron 70, es decir de 7 a 8 menos; y en las del 2015 (JxSí + CUP), un total de 72.

Por el contrario, los partidos que dieron apoyo a la aplicación del 155 de la Constitución para intervenir la autonomía después de la independencia pierden apoyos en la encuesta: de 57 escaños en el 2017 (Cs + PSC + PP) pasarían ahora a 49-52 (PSC + Cs+ PP + Vox).

Posibles pactos de gobierno

ERC tendría que pactar para alcanzar la presidencia de la Generalitat -la mayoría absoluta necesaria es de 68 escaños-. Pero podría escoger entre un pacto con JxCat -como hasta ahora, pero con los republicanos liderando el Govern- o con el PSC. La suma ERC-JxCat totalizaría 69-70 escaños (uno o dos más por encima de los necesarios); con el PSC oscilaría entre los 67 (uno menos de la mayoría) y los 70.

La CUP no sería necesaria como hasta ahora para investir a un presidente independentista. En todo caso, un pacto independentista amplio podría sumar 77-78 diputados en el nuevo Parlamento. La otra alternativa amplia posible, el pacto ERC-PSC-En Común Podem, alcanzaría 74-77.

A la pregunta de qué fórmula de gobierno preferiría para la próxima legislatura en Catalunya, la fragmentación es la tónica resultante, si bien queda en primer lugar de las preeferències, con un 22,8%, un pacto de izquierdas liderado por el PSC. En segundo lugar aparece un pacto de partidos de izquierdas liderado por ERC, con un 20,5%.

En cuanto a las combinaciones entre fuerzas independentistas, un 13,4% se decantan por un pacto de partidos independentistas liderado por JxCat y un 9,0% un pacto de partidos independentistas con ERC al frente. De hecho, el porcentaje más elevado de los consultados, un 27,8% no suscribe ninguna de estas fórmulas.