Mañana de debate entre cuperos en la asamblea, trascendental, que la izquierda independentista celebra hoy en Sabadell con 2.988 asistentes. En el turno de intervenciones de la militancia de base, las de las organizadores eran previsibles, ha habido tono, volúmenes, vehemencias y argumentos para todos los gustos y colores. La dicotomía entre investir a Mas o no investirlo ha hecho saltar chispas dialécticas entre los participantes en forma de aplauso, algún silbido y algún "¡Visca la Terra!". De nada han servido las advertencias de la mesa del conclave para que no aplaudieran ni se silbara a los intervinientes.

División en las intervenciones

Si hay que hacer caso a las intervenciones, la división es más que evidente. Ha habido ponentes que han defendido a capa y espada el acuerdo con todo tipo de argumentos. "Mao Tse Tung se alió con sus adversarios para ganar la guerra contra el Japón", ha recordado un asambleario que incluso ha defendido entrar en el Govern en caso de acuerdo. "En los Onze de Setembre, no todos éramos de la CUP", ha avisado otra para exigir el acuerdo con Junts pel Sí. "¡Tenemos delante una ventana de oportunidad histórica!", ha clamado otra participante para defender la investidura, para remachar que "sin independencia no hay revolución social". "Las contradicciones no nos tienen que dar miedo", ha recomendado un asistente mientras otro pedía "asumir la capacidad de ser decisivos". Desde la Comunidad Valenciana, un asambleario ha exigido el acuerdo "para hacer la independencia para que os vayáis ya".

Elecciones: escenario regresivo

Desde Lleida, otro participante alertaba de que unas elecciones anticipadas eran un "escenario regresivo" y que hacía falta el pacto para construir un "nuevo orden favorable a las clases populares". Desde Girona se ha defendido el acuerdo porque los que "tienen contradicciones son los de JxSí y ahora ya la oportunidad de abrir un proceso constituyente". "No investir a Mas sería traicionar la historia y volver al autonomismo e ir contra la independencia". "Tenemos que aprender a diferenciar la táctica de la estrategia", ha avisado una mujer. Y uno de los últimos intervinientes ha utilizado al popular Xavier García Albiol y su amenaza de aplicar el 155 de la Constitución si hay acuerdo: "¿No os gusta el rock and roll?, ¿que no queréis caña? ¡Sí al acuerdo!", ha exclamado.

Propuesta-chantaje

Por el lado del "no" a la investidura tampoco se han quedado cortos. Uno de los participantes ha tildado la propuesta de acuerdo como un "chantaje". Una madre autónoma ha cargado contra el plan de choque por "ridículo". "Quiero la independencia pero no a cualquier precio, ¡volvamos a la calle!, ¡hundamos al capitalismo!", ha sentenciado la misma asamblearia. En la misma línea se ha expresado un inscrito que aseguraba que "hacer el acuerdo suponía dar la espalda a Jorge –imputado y acusado por la Generalitat por disturbios en una huelga– y no darla a Mas".

Élites catalanas

"No podemos investir a Mas, tenemos que enterrar a las élites catalanas y que no vuelvan a nacer; no podemos hacer presidente al líder de un partido burgués", ha insistido otra asamblearia. "¡El plan de choque no va a ningún sitio, no a Mas y sí a la independencia para cambiarlo todo, que es nuestro proyecto político, volvemos a la calle!", ha añadido otra. "Mas es un obstáculo para ampliar la base social del proceso", defendían otros". "No podemos otorgar la hegemonía del proceso a un partido que representa la corrupción, los recortes y las privatizaciones", ha concluido otra asamblearia. "¡No a Mas, claro y contundente, queremos unos Países Catalanes libres, socialistas y feministas!", ha cerrado otra su discurso.

Foto: Los diputados Antonio Baños y Albert Botran / SERGI ALCÁZAR