El presidente del Consell per la República, Carles Puigdemont, ha presentado este viernes el equipo que lo acompañará en la nueva etapa, después de que a principios del mes de marzo fuera escogido por la Assemblea de Representants como presidente del ente. Al lado de Puigdemont, cinco hombres y cinco mujeres que trabajarán codo con codo con el president en el exilio.

Al equipo, se suman desde este momento los consellers en el exilio Lluís Puig y Toni Comín, el cantante y exdiputado de Junts pel Sí Lluís Llach, la secretaria segunda de la Mesa del Parlament, Aurora Madaula, el portavoz de Demòcrates Antoni Castellà, el portavoz de Poble Lliure Guillem Fuster, la abogada Teresa Vallverdú, la miembro de Òmnium Neus Torbisco, la miembro de la Assemblea de Representants Montserrat Corrons y la exconcejala de ICV Carme Garcia.

El pasado 5 de marzo de este año la Assemblea de Representants escogía a Carles Puigdemont president del Consell per la República, ya no con un cargo fundacional sino orgánico, después de que la institución republicana haya culminado su proceso de despliegue democrático. Ahora Puigdemont ya ha confeccionado el nuevo govern que lo acompañará durante los próximos dos años de legislatura. El lugar para presentar el nuevo equipo ha sido en Ribesaltes, en la Catalunya Nord, desde donde Puigdemont ha detallado qué funciones desplegará cada miembro.

El president Puigdemont ha querido aclarar que hasta ahora el Consell estaba formado por personas que representaban entidades y partidos, haciendo de correa de transmisión entre el Consell y sus respectivos espacios, pero ahora los miembros del govern no lo son como representantes de su formación: "Les hemos pedido que formen parte del govern por lo que pueden aportar a título particular, por su valía política, por su compromiso con el Consell, por su especialización profesional", ha detallado Puigdemont, que ha dejado la puerta abierta a nuevas incorporaciones a este govern que tiene por delante dos años de mandato.

Cargos

El cargo de vicepresidente lo ocupa Toni Comín, que desarrollará la tarea ejecutiva del día a día, y la relación y la coordinación con la mayoría de miembros del govern. Antoni Castellà será el responsable de Relaciones con la Assemblea de Representants y Relacions Institucionals. Aurora Madaula ocupará la cartera de responsable de Acció Política Interior, que no son solo los consejos locales, sino también todo lo que tiene que ver con la incardinación del Consell como institución republicana.

En el ámbito de Desenvolupament Reglamentari trabajará Teresa Vallverdú, que tendrá que dotar de un corpus propio al Consell, una institución que nace prácticamente de cero y que, por lo tanto, se tiene que autoconstituir, por lo cual tendrá que desplegar un marco de funcionamiento que tenga en cuenta la participación y la renovación democrática. El Suport als Consells Locals lo coordinará Montse Corrons, un ámbito que Puigdemont ya ha asegurado que será prioritario en este mandato, haciéndolos protagonistas. Carme Garcia, por su parte, será la responsable de Coordinació de les Delegacions dels Països Catalans, un espacio donde el Consell per la República quiere seguir creciendo.

La Acció Internacional la planificará Neus Torbisco, que más allá de coordinar los recursos humanos, marcará una dirección política para desarrollar esta tarea. Como Secretari de Govern y responsable de Acció Econòmica estará Guillem Fuster, que tendrá que gestionar los retos internos a nivel económico, pero también trabajar proyectos externos como la soberanía económica del país. Cerrando el ámbito de responsabilidades, Lluís Puig asumirá, como ya trabajaba hasta ahora, la Acción Cultural, encargada entre otras cosas de las publicaciones del Consell.

Y en último lugar, que no menos importante, estará el emblemático Lluís Llach, que como ha explicado Puigdemont no tendrá una cartera específica, sino que será conseller político. ¿En qué sentido? Puigdemont ha explicado que Llach es una figura absolutamente enriquecedora, esencial en las conversaciones políticas que tenga que tener el Consell y el independentismo, por la visión que puede aportar desde la independencia, una visión "absolutamente imprescindible para orientar las cosas".

Hecha la presentación, el presidente Puigdemont ha hecho énfasis en la tarea llevada a cabo en esta primera legislatura y ha asegurado que los "consejos locales tendrán un papel clave en la acción política". A su vez, el vicepresidente Toni Comín ha avanzado que "este nuevo govern comenzará el mandato con una declaración política que se hará pública en los próximos días" y que, en esta legislatura, se tiene que pasar "de la resistencia a la confrontación". Es por este motivo que se harán "propuestas concretas" a los partidos y entidades sobre el documento 'Preparémonos', que es la estrategia que durante la anterior legislatura el Consell ha ofrecido al conjunto del independentismo para hacer efectivo el mandato del 1-O.

La estrategia de Puigdemont

En su intervención ante la Asamblea de Representantes del Consell, Puigdemont manifestó que los partidos se han mostrado incapaces de definir la estrategia para culminar la independencia y el Consell per la República tiene que reducir su dependencia en relación con ellos: "El Consell tiene que tomar la iniciativa sin esperar consenso previo entre los partidos, porque ya se ha visto que este consenso es imposible en las actuales circunstancias", advirtió.

A lo largo de su intervención, Puigdemont evitó citar ninguna formación de manera explícita, pero se refirió a la necesidad de erradicar "actitudes fratricidas" que deterioran las relaciones entre los independentistas; subrayó que los partidos han mostrado que son capaces de pactar un gobierno autonómico pero "incapaces de definir la estrategia para la independencia, ni siquiera de crear las condiciones en que esta estrategia se tendría que construir." Por todo ello, advirtió que, una vez superada la fase inicial de creación, el Consell tiene que cambiar su aproximación al conjunto de los partidos, "tiene que incrementar la intensidad y calidad de las relaciones y reducir la dependencia". "Son imprescindibles y toda estrategia del Consell tiene que contar con el rol de los partidos, pero el Consell tiene que tomar iniciativa sin esperar el consenso previo entre los partidos, porque ya se ha visto que es imposible en las actuales circunstancias", remachó.