Después de que el Barça ganara en el Madrid por 0 a 4 el sábado en el Bernabéu, este lunes las redes sociales han hervido con las imágenes del nuevo avión que la semana pasada se compró Cristiano Ronaldo por 19 millones de euros. Pero eso no es lo que más ha llamado la atención.

El avión pertenecía a Javier Monzón, que hasta el miércoles pasado era el presidente de honor de Indra, y que, según Europa Press, había adquirido el avión a espaldas del consejo de administración y lo utilizaba como jet privado sin ningún permiso.

Nadie dentro de la empresa de tecnología conocía el contrato de leasing que Monzón firmó para acabar adquiriéndolo, un contrato que prevé un sistema de alquiler con opción a compra. Por eso y porque no hubo la “transparencia que tocaba”, los consejeros de Indra aprobaron por unanimidad que Abril-Martorell lo sustituyera.