La Conselleria de Ensenyament, al frente de la cual se encuentra Íñigo Méndez de Vigo por la suspensión de la autonomía con el 155, ha defendido este miércoles que deben ser los tribunales quienes decidan estimar o no la causa contra los profesores del instituto El Palau de Sant Andreu de la Barca citados a declarar por presunta incitación al odio por supuestos comentarios a alumnos hijos de guardias civiles tras la operación policial contra el referéndum del 1 de octubre.

Así ha respondido después de que la directora de los Serveis Territorials de la Generalitat a la comarca del Baix Llobregat, Núria Vallduriola, haya anunciado que la Conselleria pedirá a la Fiscalía que se desestime la causa.

Fuentes del departamento dirigido por Íñigo Méndez de Vigo han subrayado que las declaraciones de la directora responden a una opinión personal que no representa en modo alguno la postura de la Conselleria. A este respecto, han recordado que son los tribunales los que deben estimar o desestimar una causa "y no una administración".

La Guardia Civil, en funciones de policía judicial, ha tomado declaración a los 13 profesores desde el 4 de enero para aclarar si alguno de ellos pudo haber cometido un delito de odio y, de ser así, la Fiscalía presentaría luego denuncia o querella contra ellos ante el juzgado. A raíz de las cargas del 1-O, un total de 18 familias se dirigieron al Ayuntamiento de la localidad para expresar su malestar por los comentarios de algunos profesores.