La habitual reunión de la Mesa del Parlament se ha celebrado este martes por vía telemática. Los grupos han decidido aplazar el pleno que tenía que empezar este miércoles a la espera de superar la crisis sanitaria por el coronavirus. En previsión a que la situación pueda alargarse, se ha encargado un informe a los servicios jurídicos sobre la viabilidad jurídica y técnica para celebrar plenos de forma virtual.
El presidente de la cámara ha encabezado el encuentro desde el despacho de su casa. Roger Torrent ha convenido con el resto de grupos que se para la actividad plenaria y que sólo se convocará a los diputados por cuestiones de urgencia relacionadas con el Covid-19. Si fuera el caso, la convocatoria se haría adoptando todas las medidas excepcionales necesarias de prevención.
En este sentido, otro de los acuerdos a los cuales ha llegado hoy la Mesa del Parlamento es encargar un informe a los letrados para que determinen si es jurídicamente posible y técnicamente viable celebrar plenos telemáticamente en circunstancias excepcionales como la actual. Hacer una sesión virtual fue la exigencia de Junts per Catalunya cuando insistía para investir el presidente a Puigdemont. Entonces, el TC dijo que no era procedente. De hecho, ha sido el grupo del president quien ha pedido que se reforme el reglamento para permitir que la actividad parlamentaria pueda desarrollarse también digitalmente. Es decir, que las comisiones, los plenos y las votaciones se puedan hacer online. "El Parlament no puede ser analógico", ha señalado al portavoz de JxCat, Eduard Pujol.
La anulación del pleno que tenía que arrancar mañana miércoles implica que queda aplazada sin nueva fecha la subida de sueldo de los trabajadores públicos, que debía votarse y aprobarse en esta sesión.