Un castigo elevado. La magistrada del juzgado de lo Penal 27 de Barcelona ha condenado a 2 años y 4 meses de prisión a un joven independentista por haber coaccionado a una mujer que llevaba una bandera española y que con una decena de personas fue a dar la bienvenida al rey Felipe VI, a la Estación de Francia, el 9 de octubre de 2020, donde había unas 500 personas que protestaban contra el monarca. En la sentencia, confirmada por fuentes jurídicas a ElNacional.cat este miércoles, la magistrada casi ha aplicado la pena que pedía la Fiscalía, que exigía una condena de 2 años y 6 meses de prisión por el delito de coacciones con las agravantes de abuso de superioridad y discriminación por ideología. La condena, al superar los 2 años de prisión, implicaría entrar en un centro penitenciario, pero no es firme. Norma Pedemonte, abogada de este vecino del Alt Empordà y estudiante de enfermería, presentará recurso contra la condena en la Audiencia de Barcelona.

En el juicio, el joven aseguró que fue a la manifestación contra el rey, en pla de Palau, que no increpó a nadie y que cuando se marchaba con su grupo de amigos, un agente de los Mossos les dijo: "Os caerá una buena denuncia, hijos de puta". Por eso, su abogada pidió su absolución, además de denunciar que inicialmente este procedimiento se inició por el delito de daños por una pintada y que después se cambió a coacciones.

Por el contrario, en la sentencia, la magistrada sostiene que el joven es autor de una "violencia intimidatoria" porque considera probado que con otras personas rodeó al grupo pequeño a favor del monarca, los insultaron y no los permitió ejercer su derecho a manifestarse, además de pintar a la denunciante.

Pintada en la espalda

La Asociación Concordia Real Española convocó la manifestación de apoyo al monarca, en el mismo lugar que la protesta de signo contrario. La víctima, una mujer mayor, explicó en el juicio que llevaba una bandera española atada al cuello cuando fue a la concentración para saludar al rei, en pla de Palau, donde se reunió con otras mujeres que no conocía. "Gritábamos viva el rey, viva el rey, hasta que se nos acercó un grupo, tuve miedo y decidí marcharme", declaró la mujer, que en el juicio no recordó los insultos que le decían. "Al girarme noté frío, y como un olor de gasóleo", afirmó, y añadió que un grupo de Mossos de paisano las sacó de la zona. La mujer no reclama ninguna indemnización.

En el juicio, la fiscal responsable del Servicio de Delitos de Odio, Marta Gloria López Català, pidió que se condenara al joven independentista a 2 años y 6 meses de prisión por el delito de coacciones, con las agravantes de abuso de superioridad, y de discriminación por ideología, y aseguró que hasta cuatro agentes de los Mossos lo identificaron y vieron que se acercó al grupo de 50 personas a favor del monarca. También aseguraron que el joven, junto con otros manifestantes no identificados, increparon a las mujeres españolas, y a la víctima le pintó una cruz en la bandera española que llevaba a la espalda.  En la resolución, la magistrada subscribe y reproduce toda la versión de la fiscal.

 

En la foto principal, una imagen de una protesta contra una visita del rey Felipe VI en Barcelona / Foto: Sergi Alcàzar