Dubitativo en su declaración ante el juez y admitiendo que contactó expresamente con Carlos, el primo del alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, para hacer negocio. Así se presentó ayer el hijo de Naty Abascal, Luis Medina, para declarar señalado por un presunto fraude y blanquear las ganancias de la venta de material sanitario defectuoso y comisionar más de un millón de euros en plena pandemia derivados del consistorio madrileño. Viendo que cada vez está más ligado de manos y pies por la justicia, pone a disposición su herencia como fianza.

900.000 euros de herencia

Hay que recordar que ya declaró anteriormente que no podía ser embargado porque "sólo tenía poco más de 200 euros en el banco". Así pues, Medina pretende pagar los 900.000 euros que le ha impuesto el juez de entrada. El mismo comisionista, definido él mismo como un empresario de éxito, lo ha remitido en un escrito al juez de 'Instrucción número 47 de Madrid, Ángel Carretero. En concreto, lo que ha remitido al juez son sus derechos sobre la herencia de su abuela paterna, que todavía no ha cobrado porque la sentencia que le reconoce cuatro millones de euros por estar recorrida.

El magistrado le impuso esta fianza después de tratar de embargar sus bienes y descubrir que tan sólo tenía 247 euros en su cuenta bancaria, y por eso el comisionista fue imputado por posible alzamiento de bienes. Lo único que le pudo embargar el juez fue un yate matriculado en Gibraltar de 325.515 euros. Por otra parte, tanto en Medina como en el otro comisionista Alberto Luceño, se les ha retirado el pasaporte y tendrán que declarar nuevamente en quince días porque ve indicios claros de huida.

¿Quién era su abuela?

Victoria Eugenia Fernández de Córdoba y Fernández de Henestrosa (1917-2013) fue la XVIII Duquesa de Medinaceli que murió a los 96 años el año 2013. Todo el mundo la conocía con el sobrenombre de Mimí y ella también fue una habitual de la prensa rosa. El dinero que tenía esta mujer escandalosamente rica también provocó muchos conflictos en la familia. Los representantes de los Medinaceli, los Medina y los Feria, estos de la banda de Luis Medina, son las tres ramas de una de las casas nobiliarias más ricas y poderosas de España que acabaron en un juzgado de Sevilla por intentar llegar a un acuerdo sobre la herencia de la duquesa de Medinacelli, ocho años después de su muerte, es decir, en el 2021.

Después del ducado de los Alba, el de Medinaceli era el más importante. Poseía 79.146 hectáreas, tres decenas de títulos nobiliarios y jardines, hospitales, castillos y palacios por toda España, el Pazo de Oca En Estrada y la sevillana Casa Pilatos incluidos. Tuvo tres hijos pero todos, menos uno, se murieron antes que ella. El vivo es Ignacio Medina, el actual duque de Segorbe, que se ha enfrentado a los nietos de Mimí, entre ellos Luis Medina, que también acabó cobrando una parte del pastel.

Un padre pederasta

Así pues, el padre del comisionista era el duque de Feria, Rafael de Medina y Fernández de Córdoba. Este, después del divorcio con Naty Abascal en la década de los ochenta, empezó a consumir grandes cantidades de cocaína y de alcohol y frecuentar famosos prostíbulos de Sevilla. El escándalo mayor se produjo cuando fue condenado por tráfico de drogas y raptó a una menor de 5 años. Ingresó en la prisión por estos delitos en 1993 y fue acusado de pederasta y corrupción de menores por unas fotografías de él con varias niñas desnudas rodeándolo. Se suicidó en el 2001 después de ingerir una gran dosis de barbitúricos.