Carta del conseller de Territori i Infraestructures, Josep Rull, al ministro de Fomento en funciones, Rafael Catalá, por las "incidencias de forma reiterada que están afectando a la red ferroviaria". Rull considera que "ha llegado el momento que por parte del ministerio se actúe con la contundencia que requiere la situación", recordando, entre otros, el caos que se vivió este lunes cuando más de 250 usuarios se quedaron atrapados en un tren durante más de dos horas.

La misiva pone el foco en ADIF, reivindicando que se le exija que "con urgencia" actúe para prestar de "forma adecuada" los servicios públicos que tiene encomendados. Hace falta, según apunta Rull, "una infraestructura en condiciones de fiabilidad y seguridad", ya que "es un servicio de interés general y esencial para la comunidad".

El contexto es tan lamentable para el conseller que, más allá de exigencias al vuelo, en su opinión la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria tendría que intervenir auditando las condiciones en que se está administrando la infraestructura, "para valorar hasta qué punto ADIF está cumpliendo con su obligación de administrarla de forma eficiente, con la adopción de las medidas correctoras que correspondan por parte de la Agencia".

Con todo, el conseller recuerda que la Generalitat ya ha hecho los deberes en este sentido, formulando un requerimiento previo, amparado en el artículo 29.1 de la ley reguladora de la jurisdicción contenciosa-administrativa, por el que instaba a adecuar la infraestructura de Rodalies de Barcelona. Por eso ahora le pasa la pelota al Gobierno, concluyendo que "confío en que en breve me puedas informar sobre el resultado de las gestiones llevadas a cabo".

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