Una veintena de miembros de la ANC han ocupado esta tarde la sede de la Comisión y del Parlamento Europeo de Barcelona, en la esquina de Passeig de Gràcia-Provença. Una vez dentro, han entregado una carta que la entidad dirige al presidente del Parlamento Europeo, Jean-Claude Juncker y al representante de las instituciones europeas en Barcelona, Ferran Tarradellas.

En el escrito avisan de que Europa se adentra en tiempos oscuros, con la irrupción de partidos extremistas. Y enmarca en ese contexto de preocupación el juicio que deberán afrontar los líderes independentistas catalanes. El texto defiende que los doce encausados se enfrentan a penas por crímenes que no han cometido. Añaden, además, que la única violencia que ha habido en el proceso catalán es la que ejerció la policia el 1-O. 

La carta aprovecha para reivindicar una vez más el derecho a la autodeterminación, recogido tal como se explica, en la Convención Internacional de Derechos Civiles y Políticos. 

La ANC denuncia que se está produciendo una grave violación de los derechos humanos en el corazón de Europa. Por eso piden a la Comisión Europea que active el artículo 7 del Tratado Europeo para retirar a España su derecho a voto y representación.