El caganer del president Carles Puigdemont se está convirtiendo en la figura estrella de esta Navidad. No solo en los hogares catalanes sino que, a estas alturas, es el más demandado por toda España.

El gerente de la empresa Caganer.com de Torroella de Montgrí, Sergi Alós, ha explicado que el año pasado el más vendido fue el presidente Donald Trump y que este año Puigdemont lidera el ranking de manera indiscutible. Y lo hace en lugares, de entrada, sorprendentes. Es el caso de una parada de objetos navideños de la plaza Mayor de Madrid.

En Catalunya es uno de los lugares donde más se está vendiendo, pero el president también lidera el ranking en el resto de España. Alós explica que están vendiendo a prácticamente toda la geografía española. También en Madrid, desde donde, paradójicamente, los pedidos no paran de llegar.

En concreto, el éxito de ventas en la capital española se focaliza en una parada que desde hace más de 70 años se instala por estas fechas en la plaza Mayor. Alós dice que la primera petición la recibieron hace semanas y que "mientras que de Rajoy pedían diez ejemplares, de Puigdemont ya pidieron veinte de entrada, porque decía que ya tenía reservas".

Agotado

Tanto es así que en solo dos días todos los caganers del president se agotaron y tuvo que pedir 80 más. El responsable del establecimiento, Fernando Jiménez, ha explicado que ha sido una "auténtica locura" y ha remarcado que "la gente no lo compra para mofarse sino porque quiere tenerlo en su colección". A estas alturas, ya ha vendido unas 35 figuras que representan a Puigdemont y no descarta más pedidos.

Alós dice que el año pasado el 'top ten' lo lideró el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, y que este año ha sido el turno de Puigdemont, aunque la figura la idearon el año pasado. A pesar de eso, admite que seguramente nunca antes un "caganer de ámbito nacional" había tenido tanta repercusión por toda España.

Además, remarca que también se está vendiendo muy bien en los Estados Unidos y en varios países de Europa. "Seguramente, porque muchos siguen la situación política y porque hay muchos catalanes residentes en el extranjero", insiste Alós.