La sequía y la emergencia climática son las protagonistas este martes de un pleno monográfico en el Parlament, tres semanas después de que Catalunya entrara en emergencia por la falta de agua y con los embalses de las cuencas internas por debajo del 16%. El president de la Generalitat, Pere Aragonès, ha sido el primero en intervenir (sin tener en cuenta los dos grupos que habían propuesto el pleno, la CUP y En Comú Podem) en este debate, justo antes de que interviniera el conseller del ramo, David Mascort. Y Aragonès ha aprovechado la ocasión, con el Parlament lleno, para anunciar que los presupuestos del 2024 que el Govern todavía no ha presentado incluyen 1.405 millones de euros para luchar contra la sequía, reclamando a los grupos parlamentarios que les den apoyo para que estos puedan entrar en vigor. Según ha señalado horas antes la portavoz del ejecutivo catalán, Patrícia Plaja, es "cuestión de días" que se llegue a un acuerdo para que las cuentas catalanas salgan adelante.

 

Evidencias contra los negacionistas

Aragonès ha escogido empezar su intervención con una serie de evidencias que demuestran la emergencia climática que algunos se empeñan en negar, como el aumento de las temperaturas con récords históricos en el país el verano pasado, asegurando que su primera prioridad como president de la Generalitat es poner el país al día para la lucha contra el cambio climático. Durante estos últimos meses la gestión del Govern de la Generalitat ha sido a menudo criticada por parte de los partidos de la oposición, pero Aragonès les ha reprochado que "si alguna cosa no se le puede imputar al Govern, es la falta de planificación y dejadez", haciendo referencia al Plan Especial de Sequía, aprobado en 2020 y que regula las restricciones en las diferentes fases. "Hemos actuado desde las primeras semanas de la legislatura, si no lo hubiéramos hecho, haría un año que estaríamos en emergencia", ha reiterado, lamentado que el ejecutivo catalán y Catalunya en general han estado pagando en los últimos meses "las decisiones del pasado".

Un salto "incuestionable"

"En esta sequía, como gobierno, nos ha tocado poner el país al día, hacer el trabajo que estaba por hacer, después de años sin inversiones, bien por endeudamiento o por austeridad mal entendida. Ahora pagamos las consecuencias de años de sequía de inversiones", ha insistido el president Aragonès, que ha puesto el foco en las infraestructuras que se están licitando y ejecutando, reclamando en que estas no se pueden frenar aunque empiece a llover y se solucione la falta de lluvias: "No cometamos errores del pasado", ha deseado el jefe del ejecutivo. El president ha reiterado que el "salto adelante en energías renovables y la transformación para adaptar el país a una nueva realidad climática" en los últimos años, desde el 2021 cuando ERC llegó a la presidencia de la Generalitat, son "incuestionables", lamentando de nuevo que "durante años" eso no había sido una prioridad para sus predecesores.